PiX Juegos, un pequeño estudio de Castellón,
ha cancelado su juego
La pesadilla de Ripollés, después de que la productora que tiene los derechos de explotación de la obra del artista
Juan Ripollés se lo exigiera por escrito. La productora le pedía a PiX Juegos que eliminara cualquier rastro del juego y se retractara en público, porque «no tienen legitimidad ni autorización para desarrollar un juego animado sobre el artista ni sus esculturas y creaciones». El estudio explica que han tomado la decisión de dar carpetazo al proyecto «no porque a Ripollés no le guste o le parezca incorrecto, sino porque realmente entra en conflicto con la producción de la serie de dibujos animados que están realizando que utiliza a los mismos personajes». La pesadilla de Ripollés era un juego humorístico en el que el artista debía enfrentarse a sus creaciones, que cobraban vida para aterrorizar a la ciudad de Castellón.
Vidoxmedia Group está haciendo algo llamado
The Ripos, una serie de dibujos que sí tiene el beneplácito del escultor; ambos trabajos entraban en conflicto, pues, por partir del mismo material de base. Aunque desde PiX Juegos intentaron
contraatacar diciendo (con razón) que «las esculturas son símbolos públicos de la ciudad y que pueden utilizarlas», finalmente han decidido cancelar el proyecto. Pablo Navarro, director del estudio, se consuela porque «por lo menos ni ganamos ni perdemos nada.
Se trataba de una producción amateur sin ningún objetivo, salvo ser publicado y recibir feedback, por lo que no hemos perdido mucho». Navarro reconoce también que «cuando lo empezamos a desarrollar sabíamos que iba a llamar la atención, pero no tanto, y tampoco nos imaginamos que no podríamos publicarlo. Lo que ha ocurrido ha sido desmesurado, pero no por censura, sino por ignorancia por nuestra parte. Están produciendo una serie de animación infantil y que nosotros hagamos un videojuego utilizando los mismos personajes peleándose no es la mejor opción».
Ripollés, con un colegui. A Ripollés
le «duele» el «esfuerzo, el interés y el entusiasmo que han empleado estos chicos en la creación del viedojuego», pero también tiene claro que «si se hubiesen puesto en contacto conmigo ante de realizarlo, les hubiera explicado que tenía cedidos los derechos de imagen de mis esculturas para animación y no hubiésemos llegado a esta situación».
La pesadilla de Ripollés ganó el I Concurso de Nuevas Tecnologías y Videojuegos del Ayuntamiento de Castellón; quizá lo recordéis también de los
Indie Burger Developer Awards de este año, donde también fue premiado. El 11 de octubre, dentro de la
VilaNET (una LAN party de Villarreal), PiX Juegos
organizarán un taller llamado
No se puede crear un videjuego para Android en 3 horas 2.0, en el que darán las bases para desarrollar algo que «no será un FIFA o un Medal of Honor, pero si un buen minijuego».
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La industria cultural española: Como la del resto del mundo, pero con toneladas de caspa por encima.
Es una pena, los conozco muy de cerca y sé que se lo han currado bastante y han promocionado mucho el juego, para que luego vengan a darte la brasa y no puedas hacer nada más que cancelar un proyecto con el cual no te lucras.
¿Quien pollas es el Juan Ripollés este y porque es tan «famoso»? A mí me parece poco más que un cutre imitador de Picasso/Dalí. Le gusta ir de excéntrico y hacer el mamarracho, ridiculizando incluso al ámbito rural.
Su página no tiene desperdicio, todo chorradas. Y su vídeo es la mayor frikez casposa que he visto en mi vida…
http://www.ripolles.es
No se merece ni un juego, ni dibujos ni la fama que tiene. Pero que le vamos a hacer, eso pasa con muchísima gente en todos los campos del arte y la «cultura».
Ripolles en vez de un juego merecia una patada en la boca. No me extraña que a nivel artistico tengamos que remontarnos a gente como Picasso por que actualmente se le da coba a esta clase de merluzos.
PD: Si, las esculturas pertenecen al pueblo (las que él no haya vendido a particulares, que deben de ser 0) asi que no existe derecho privado sobre ellas. Pero claro, con tal de no meterse en temas legales por algo sobre lo que no ganarian dinero, era mejor dejarlo estar
@Nelocanelo De cerca, ¿eh primo? xD
@Lokewen Aunque pague el pueblo, no significa que pierda los derechos de autor de sus esculturas. Lo que sí que hay es la ley de libertad de panorama, que permite que cualquiera pueda utilizar la imagen de cualquier edificio emblemático o escultura expuesta permanentemente y pública, sin ningún problema.
@Timofonic Honestamente, no entiendo ni me gusta la obra de Ripollés, pero la persona que hay detrás del artista es muy grande (y no hablo físicamente). También hay que recordar que el hombre tiene ya 81 años, y se le nota.
El juego se lo merecía, pero desde VidoxMedia SL no han querido comprenderlo, sin saber han hecho caso a las falacias de la prensa y no se han dado cuenta de que este juego tiene más de homenaje que de parodia. Y eso que no entiendo su obra, pero si tanta gente está interesada en su arte supongo que tan mal no estará.
Lo que más le gustó al artista del juego es que «genera polémica». «Lo peor que te puede ocurrir no es que tu obra sea odiada, sino que no despierte pasiones en contra o a favor.»
@panreyes
Cuando una parte del estado realiza un concurso, os participantes pierden los derechos sobre la obra y pasa a pertenecer al estado/comunidad/ayuntamiento. Aunque en el caso de este señor, imagino que al ser en su mayoria contratos concedidos a dedo, esto posiblemente no sea asi, en eso supongo que tienes razon.
Teniendo en cuenta que no es más que un perro faldero del capo Fabra, tampoco respeto mucho a quienes quieran hacerle un «homenaje»