Aun siguiendo los criterios estéticos de la Super Nintendo americana (que era lo más feo que se ha diseñado jamás), esta pequeña portátil me ha robado el corazón. Se trata, en efecto, de una Super Nintendo portátil compatible con los cartuchos de la original, con salida de vídeo para conectarla al televisor, pantalla de 3,5″ y hasta dos puertazos para enchufarle dos pads oficiales y usarla como consola de sobremesa de toda la vida. La lista de inconvenientes, eso sí, es aún más larga: solo se vende en EE.UU., no hay garantía de que funcione con todos los juegos (sí con Zelda: A Link to the Past, Star Fox, Super Mario World o Chrono Trigger), la batería dura dos horas y media y tampoco hay seguridad de que los adaptadores NTSC>PAL funcionen. De todos modos el cacharrico solo cuesta 80 dólares en Amazon, así que si los chavalotes de Hyperkin se animan a lanzar esta SupaBoy en versión europea, que cuenten conmigo. Gracias, Joystiq.
Redactor
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Esta bastante guapa, para los amantes de Nintendo aunque creo que estos ya tendrán la original por casa.
A ver si usas la que te di yo, mamón.
Está tardando mucho en salir el clásico gilipollas de los emuladores, ¿no?
@uoho
La uso masturbatoriamente cada día. No la quieres de vuelta, créeme.
Me esperare a la revisión con 2 sticks.
menudo rompe espaldas…
Nintendo les meterá un puro por competencia desleal: hardware del año de la María Castaña para jugar a juegos viejos.
¿La venden con mochila para transportar los cartuchos?