Botón ZR. Palanca Izquierda. Solo necesitamos dos indicaciones para comenzar a disfrutar de Ape Out, el nuevo smash ‘em up de Gabe Cuzzillo cuyo convincente tráiler consiguió que incluso los que no somos habituales del género lo marcáramos en nuestro calendario. Y lo mejor es que ese mismo avance no tuvo la necesidad de mentir o elevar nuestras expectativas. Estamos ante un tráiler honesto. En el minuto y veinte de vídeo, Devolver Digital muestra exactamente qué es lo que vamos a encontrarnos al iniciar una partida. ¿El problema? Que no es mucho más de lo que encontramos al terminarlo.
En Ape Out controlamos, desde una perspectiva cenital, a un gorila cabreado en busca de libertad. A lo largo de las tres horas de duración del título deberemos avanzar a través de laberínticos niveles, destrozando a todo aquel que se nos ponga por delante. Nuestros enemigos no solo nos superan en número, sino que vienen armados con las más diversas armas, desde escopetas de perdigones a originales explosivos, pasando, incluso, por lanzallamas. A nuestro favor, junto con la velocidad, tendremos la fuerza necesaria para levantar, aplastar y lanzar a nuestros rivales. Además, durante la partida deberemos aprender a abrir compuertas y realizar alguna que otra pequeña acción para conseguir avanzar. Nada más.
Es precisamente la falta de mecánicas de pelea —y el hecho de el juego pueda completarse con poco más que empujones— lo que hace que en cierto momento llegue a ser anodino. Una vez dominas el clásico agarrar-usar de escudo-lanzar, Ape Out se apoya en los ritmos de jazz de su diseño sonoro para crear emoción y, dado que la música reacciona a nuestra violencia, Cuzzillo nos presiona para comenzar a matar nada más entramos en el nivel, volviendo el gameplay bastante rígido y evitando que experimentemos, por ejemplo, con el sigilo u otros tipos de estrategia (como agolpar a muchos enemigos, buscar uno con explosivos y lanzarlo contra la multitud).
Como los buenos juegos minimalistas, Ape Out se asienta con fuerza en las bases de su género que, en el caso de los beat ‘em up, se reducen a la acción frenética, gran número de enemigos, niveles largos y mecánicas sencillas. Sin embargo, y pese a que el título implementa estos mínimos con maestría, llama la atención precisamente por lo prescindible: sus decisiones artísticas y creativas. Con un diseño visual que utiliza bloques de colores sólidos (flat colors) complementarios, y un diseño sonoro que reacciona a nuestra manera de jugar, Ape Out abre con una escena de sobrada contundencia y aguanta fuerte hasta más de la mitad del segundo disco (el juego se estructura alrededor de 4 discos o fases con diferente ambientación musical), cuando la falta de novedades, unida a un pequeño bajón en la curva de dificultad, hacen evidente que, tras la explosión de estímulos inicial, el juego no tiene nada más que ofrecer.
Dentro de la parte más técnica cabe resaltar el diseño de niveles, largos laberintos que consiguen ser un reto sin la necesidad de hacer que nos perdamos. No obstante, y más allá del propio mapa, es en el escenario en donde Ape Out desaprovecha más oportunidades para desafiar al jugador. La inclusión de puertas que retrasan nuestro avance y de largos pasillos en donde es dificil escapar de los golpes, no se utiliza tanto como debiera y, en ocasiones, al hacerlo justo a mitad de un nivel, no producen tanta frustración como de aparecer justo cuando nos encontramos a punto de acabar.
Durante una entrevista con The Verge (que la publicación utiliza para completar su análisis), el propio Cuzzillo comenta que Ape Out es un juego que funciona cuesta abajo. Que una vez dominado no hay nada más, aparte de la estética, para mantener el interés del jugador. Esta autoconsciencia me deja buen sabor de boca a la vez que consigue que mantenga el interés por los futuros proyectos del desarrollador. Ape Out parate de una idea que se gestó en la universidad y que creció gracias a una incubadora. Cuzzillo podría haber optado por dar inspirarse en aproximaciones más actuales al género como Hotline Miami y, sin embargo, decide mantenerse fiel a su idea original de experimentar con la música y entregar un proyecto, ante todo, personal.
No creo que Ape Out sea el indie del año que muchos no dudamos en anticipar. Tampoco es un mal juego. Teniendo en cuenta que ha sido desarrollado en solitario durante cinco años y su contundencia estética y musical, podríamos estar hablando de un juego de autor. Un «juego de música» en el que el ritmo lo marcamos nosotros. Y de qué manera. A puñetazos. [7]
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No sabía que el arte estaba a cargo de Bennett Foddy, creador de juegos tan originales como QWOP, GIRP, CLOP o Getting Over It.
Bue, si me lo cruzo lo jugaré, pero no iré a buscarlo. Intuyo que hubiera molado algún plotwist como que nos hubieran puesto a controlar, a partir de cierto nivel, a un super-simio que debe perseguir al que habíamos estado manejando hasta el momento, o alguna movida así de cambio de mecánicas.
Voy a extender un poco el comentario que dejaba en la entrada del podcast.
Dejando a un lado el analisis puramente subjetivo, solo faltaba que no pudiera no gustarte el juego, creo que has sido un poco injusta o poco detallista con algunas de tus criticas, Marta. No se si por falta de tiempo o interes.
Empezando desde un punto de vista mas general, comentas que el juego tiene poco que dar al jugador una vez que pasas el umbral de las primeras horas, cuando el apartado audiovisual deja de sorprenderte. No se que decirte, Ape Out ofrece claras alternativas y opciones que son dificiles de pasar por alto:
-El modo especial en el que tienes que entrar y salir, genial en forma y desarrollo.
-El modo dificil, que joder, es realmente dificil y te obliga (o invita) a jugar de una manera mucho mas inteligente.
-El modo arcade, muy disfrutable y que cambia totalmente la experiencia de juego, haciendo las delicias de los que se pican con un crono y puntuaciones. (Lo convierte practicamente en otra «cosa», la verdad)
Aqui puedo apoyarme para rebatirte el comentario de que se vuelve anodino, puesto que precisamente le da tal vuelta jugable a la propuesta, que, como decia arriba, es como si hubieras metido Ape Out 2 en la consola.
Luego comentas lo de las tres horas de duracion. Bueno, si, son tres horas. Pero son casi mas un preambulo del verdadero juego que se abre despues, el verdadero Ape Out (no tener ganas de jugar esa parte no implica que el juego se acabe ahi.) Bayonetta no dura 6 horas.
El tema de experimentar con el sigilo, pues no se, estoy en absoluto desacuerdo.
Que te apetezca escuchar la musica y todo lo que puede ofrecer el juego a nivel sonoro, genial, pero no hables de rigidez, puesto que el juego no te empuja a ello. Es algo totalmente subjetivo a tu nivel. En absoluto te impide experimentar otras formulas, de hecho te empuja a ello con los diferentes logros (mas alla de las satisfacciones personales de hacer los niveles de diversas maneras)
Lo que si que me ha sonado extraño es lo que comentas de la curva de dificultad. En que momento notas ese bajon? Porque creo que el juego es un crescendo constante hasta la explosion de dificultad a la salida del barco (tremendos ultimos niveles)
Para acabar,,comentar el tema de los pasillos. El juego siempre te propone soluciones a este inconveniente si juegas con cabeza y valorando las alternativas. Otra cosa es que te veas sometido (como dices en el analisis) a jugar de cierta manera porque crees que el desarrollador te incita a ello, nada mas lejos de la realidad, desde mi punto de vista.
En fin, lo dicho.
Entiendo que el juego no te haya convencido, pero creo que no has sabido o querido ver su verdadera propuesta y el analisis se me antoja bastante injusto y superficial.
Sobra decir que a mi me ha encantado y que me parece desde ya de lo mejor del año.
Los fans del genero, dadle una buena oportunidad.
@martatrivi
Se te olvidó poner para qué sistemas sale, no?
@philip_s_owen
Hey! Pues a ver, a nivel de videojuego puro yo creo que es indudablemente peor (que no significa malo, obviamente) porque ademas se ve limitado por la propia idea. Lo bueno es que lo subsana con un nivel audiovisual genial y un sistema mele que es mucho mas complejo (o se puede usar de manera mucho mas compleja, si quieres) de lo que parece en un principio.
Por no hablar de todo lo que se abre ante ti al «acabar» el juego.
Si te gusta Hotline, no creo que te disguste Ape Out. Por precio y por originalidad creo que merece la pena apoyarlo. Si te quieres acercar mas a los dos Miami, Hong Kong Massacre es otra buena opcion. El analisis que hizo Fran dio en el clavo, en lo bueno y lo malo. Un 7 mucho mas comprensible en relacion a sus meritos, bajo mi punto de vista.
Un abrazo.
La verdad que pintaba regulero
Aun así le voy a dar un tiento. Aunque seguramente me espere, pinta a carne de bundle
Salu2!
A mi el juego me ha enamorado. Es puro arte. La música es algo increíble y que, si no llega a ser por el Tetris Effect y su fase de la ciudad, única. Aunque aquí creo que lo hacen mejor, es un punto más dinámica en lo que hace y en la variedad según las distintas pantallas.
La música es una pieza más del engranaje del Ape Out; el arte es obvio que es único, minimalista, sí, pero con el efecto ese de “dibujo coloreado” que lo hace muy especial.
Después lo que hace con la perspectiva cenital es muy novedoso, porque cuando se usa esta cámara, normalmente, lo vemos todo; lo que hay detrás de las puertas, las esquinas… aquí no, aquí se ve lo que se ve delante del mono, y lo demás queda oculto usando el propio mapa, uniendo sin que nos demos casi cuenta mecánicas y arte.
Otro tema aparte es el juego en sí, que puede parecer corto, pero la historia principal no es sino un entrante, un caramelo que sirve como gateway drug a la segunda vuelta en una dificultad más alta (todo es más alto, las pausas más tensas, la música más engorilante), que es donde debemos exprimir las herramientas que tenemos a nuestra disposición, que aún siendo pocas, dan mucho, mucho juego. Lo que se suele llamar easy to learn, hard to master, vamos.
Total, una joya moderna, que es mucho, mucho más que un “Hotline Miami con monos y jazz”.
Desde el Just Shapes and Beats esperando este. A ver que tal ;D
Muy rico el análisis. Lo voy a comprar más pronto que tarde. Un abrazote Marta. Y otro para @diegodcsantos que me voy entre los dos más que convencido. Que vaya bonita la semana.
@andresbaez
Desde luego el análisis de @diegocsantos (gracias por escribirlo) es pura pasión ¡Ojalá lo hubiera disfrutado tanto! A mí Ape Out no me invitó a esa segunda segunda vuelta pero me gusta ver qué un indie tan experimental lograr convencer a tanta peña <3
He editado para mencionar a Diego pero estoy en el móvil y no sale la mención ¿?
@philip_s_owen
Te digo que habiendo disfrutado el Hong Kong, no es mucho más que un Hotline fofo. Con sus cosas, vamos a ver, a mi me gustó, pero no es nada para tirar cohetes.
Esto es otra cosa, eh. Y no me parece justo meterlo en el mismo saco que Hotline solo por la perspectiva + sangre, porque no comparten mucho más que eso. Si hacemos eso al final todos los fps son Doom, y no es así.
@philip_s_owen
Creo que el Ape Out tiene mucho mas que decir a todos los niveles que el Hong Kong, como dice @potajito.
Se me antoja corto un 7.
Pinta bien, guardado en lista de espera.
Hace tiempo que no enciendo la switch, Lo Ultimo Gris, que le tenia Muchas ganas… Y si muy bonito la verdad, pero en Lo demas no me ha invitado a llegar al final.
Qué gustazo: Leer un análisis de un juego, bajar a los comentarios, leer el análisis de un usuario dando otro punto de vista bien argumentado, bajar más y leer la réplica de la analista…
Me habéis alegrado la espera para renovar el DNI, cojones.
Monos? Ritmo? Un Donkey Konga cenital? https://es.wikipedia.org/wiki/Le%C3%B1a_al_mono_que_es_de_goma ?
@diegodcsantos
Gracias por los apuntes!