Análisis de Valkyria Chronicles 4

Dice el refranero que lo bueno, si breve, dos veces bueno. No es por poner en duda la sabiduría popular, pero se me ocurren muchos casos donde lo bueno no tiene por qué ser breve y donde tiene todo el sentido del mundo querer más de algo que nos gusta. A mí me pasa con Valkyria Chronicles. Disfruté muchísimo del primero, le eché incontables horas al segundo, lamenté que el tercero nunca saliese del Japón y compré el cuarto el día de salida. Tras más de cincuenta nuevas horas en esa Europa alternativa y todavía con muchas cosas que hacer, os puedo decir con la mano en el corazón que no tengo ningunas ganas de que se acabe.

He estado releyendo el fantástico análisis que hizo @dondepre hace hoy exactamente una década y prácticamente todo se podría aplicar a esta cuarta entrega. No es casualidad. Después del salto a PSP que dio la serie, con las limitaciones técnicas que eso implica, se quería volver a una aventura más parecida a la de la primera entrega. Misión cumplida, SEGA. Las sensaciones que me ha producido Valkyria Chronicles 4 han sido muy similares a las del original. No solo porque el aspecto estético del juego (esa resultona imitación de acuarela sobre lienzo) es prácticamente idéntico, sino porque el sistema de combate BLiTZ se mantiene igual con pequeños cambios.

Para el que no sepa absolutamente nada sobre la serie, creo que no está de más hacer un pequeño repaso. Valkyria Chronicles se ambienta en una especie de II Guerra Mundial alternativa entre el Imperio y la Federación, con el pequeño principado de Gallia en medio de todo el fregao. La historia se nos cuenta a través de escenas cinemáticas y diálogos que vamos seleccionando sobre un libro.

En cuanto a los combates, se realizan en escenarios amplios y, aunque se trata de un juego de estrategia por turnos, no tenemos los habituales cuadrículas para desplazarnos por el escenario popularizadas por Shining Force, Fire Emblem, Tactics Ogre o Arc the Lad, por nombrar algunos clásicos. Aquí el movimiento de nuestros personajes se basa en sus puntos AP. A más puntos, más distancia podemos recorrer. Además, las acciones que tenemos disponibles en cada turno (CP o Command Points) son muy flexibles. Lo mismo podemos mover a un personaje tres veces que dejar que los puntos se acumulen para el siguiente turno.

Como es habitual en el género, contamos con diferentes tipos de unidades que tienen sus puntos débiles y fuertes. Los exploradores, por ejemplo, tienen un enorme recorrido y pueden ver a los enemigos a mucha distancia, pero su ataque y resistencia son bajos. Las tropas de asalto, por contra, son verdaderas máquinas de matar, resistentes y con gran poder destructivo, pero no pueden recorrer distancias tan grandes. A esas dos clases hay que sumarles los lanceros, los francotiradores, los ingenieros y la gran novedad de esta entrega, los granaderos. La combinación de esas diferentes clases es clave para cumplir el objetivo de cada misión, que suele ser capturar el campamento enemigo.

Al terminar cada misión recibimos una puntuación y recompensas en forma de armas, experiencia y dinero. La experiencia nos permite entrenar a nuestras diferentes clases para subirlas de nivel y tener acceso a nuevas habilidades. El dinero, para mejorar nuestro equipo, armas y vehículos.

Casi todo lo que os he contado ya estaba en el primer Valkyria Chronicles. ¿Qué ha cambiado aparte de la inclusión de los granaderos? Uno de esos cambios, heredado de Valkyria Chronicles 2 si la memoria no me falla, es que usar un tanque ya no cuesta el doble de CP que una unidad de infantería. Eso invita a hacer un uso más frecuente de los vehículos. Otro cambio importante es la posibilidad de usar a uno de nuestros líderes para que comande a un pequeño escuadrón. Esto permite, por ejemplo, usar a una unidad con mucho movimiento, como un explorador, para “arrastrar” por el escenario a unidades lentas como lanceros o granaderos. Además, nos permite realizar ataques combinados de forma sencilla.

También es nuevo el sistema Brave, que se activa a veces cuando un personaje cae en combate y nos permite elegir entre aumentar las estadísticas y dar un turno de acción a un personaje cercano, o bien disponer de un movimiento más en un estado de invencibilidad. Una vez seleccionada una acción u otra, nuestro personaje queda incapacitado.