Hace ya cuatro años que Joakim Sandberg, alias konjak, lanzó este Noitu Love 2: Devolution, originalmente disponible a través de su web; este lunes el juego se ha lanzado en Steam, por un precio ridículo y que no llega a los cuatro euros. Los que sigáis un poco esta web quizá recordéis que hace un año os hablamos de un proyecto que nos apasionó: The Iconoclasts, un plataformas de acción desarrollado por, exacto, Joakim Sandberg y con un desarrollo tormentoso que está haciendo que el juego, aunque activo, se retrase constantemente. El lanzamiento de Noitu Love 2 en Steam sirve, pues, un poco como sustituto a Kickstarter: el dinero que saque vendiendo el juego le ayudará a sacar adelante The Iconoclasts, y eso nos alegra mucho. Además de servirnos para descubrir un buen hacer que da esperanzas en que The Iconoclasts sea un gran juego, Noitu Love 2 es, también, un plataformas de acción en el que controlamos a Xoda Rap, a la que tenemos que llevar de un nivel a otro sobreviviendo a montones de robots malvados. La fórmula WASD para movernos más ratón para apuntar y atacar funciona más que bien: algunas mecánicas de niveles concretos no son tan intuitivas, pero el control de Xoda es ágil y es un placer patear traseros metálicos con ella en lo que acaba pareciendo un delirio de los mejores Treasure de la época de Super Nintendo. Además de Xoda, perdonadme por el spoiler, a medida que terminamos el juego vamos desbloqueando personajes nuevos con los que podemos volver a jugar. Además del cambio estético, cada personaje tiene sus peculiaridades que hacen que comenzar de nuevo, aunque no sea un juego especialmente largo, sea muy satisfactorio: muchas áreas parecen totalmente nuevas gracias a los ligeros cambios que se introducen en el diseño de niveles y, sobre todo, a las diferencias entre unos personajes y otros. Si a esto le añadimos las distintas dificultades, el reto que supone terminar el juego en las más difíciles y los secretos que vamos encontrando, Noitu Love 2 resulta ser algo más largo de lo que aparenta en una primera vuelta. Con Fez decíamos que su truco estético y referencial iba más allá de la pamplina nostálgica; en Noitu Love 2 también, pero menos: es un juego de 16 bits diseñado con la mentalidad de los 16 bits muy presente en todo momento, a pesar de que, claro, el control con el ratón siempre nos trae un poco al presente. «Intentad imaginar DE VERDAD que jugáis este juego en los 90. Con el ratón de Mario Paint», dice konkak en su web. Esa filosofía se nota, por ejemplo, en el diseño de niveles, que no es especialmente brillante pero sabe darnos momentos memorables. La mayoría de ellos vienen en forma de jefes finales, donde sí que hay un derroche de imaginación muy a tener en cuenta. Cada uno tiene una forma de ser eliminado distinta, y no se limita a uno por nivel: en cada una de las 7 pantallas encontramos varios jefes de mitad de fase, muchos de ellos geniales, además del jefe final, evidentemente más grandes y espectaculares y, en general, más difíciles de eliminar. Las limitaciones técnicas del juego, creado de una forma bastante rudimentaria (konjak es artista, no programador, al fin y al cabo), hacen que no haya logros ni demasiados añadidos en esta nueva versión para Steam, aunque algunos problemas de compatibilidad y cierres inesperados que al parecer sí se sufrían en las primeras versiones de 2008 aquí no existen. No me duele especialmente la falta de experiencia en programación de su creador: Noitu Love 2 es, al final, una experiencia estética de lujo para los fans de los 16 bits que sólo buscan eso, una réplica nostálgica de aquella forma de hacer juegos en el pasado. No es especialmente largo, ni será de los que recordemos con una sonrisa tonta durante años, pero Noitu Love 2: Devolution sí es suficientemente agradable como para soportar seis o siete vueltas, a pesar de los años, y también es cuatro euros bien invertidos para enriquecer nuestra biblioteca de Steam. Cualquier ayuda para que Joakim Sandberg tenga más facilidades para trabajar en The Iconoclasts es bienvenida; si de paso nos llevamos un buen juego para hacer la espera más llevadera, el negocio parece redondo. [7]
El otro día me lo regaló Konjak himself por el twitter. Lo jugué cuando salió y el otro día volví a jugarlo. Sigue siendo maravilloso. La única pega que le pongo es mi inutilidad para hacer double tapping con la mano izquierda en teclado.
Hace ya cuatro años que Joakim Sandberg, alias konjak, lanzó este Noitu Love 2: Devolution, originalmente disponible a través de su web; este lunes el juego se ha lanzado en Steam, por un precio ridículo y que no llega a los cuatro euros. Los que sigáis un poco esta web quizá recordéis que hace un año os hablamos de un proyecto que nos apasionó: The Iconoclasts, un plataformas de acción desarrollado por, exacto, Joakim Sandberg y con un desarrollo tormentoso que está haciendo que el juego, aunque activo, se retrase constantemente. El lanzamiento de Noitu Love 2 en Steam sirve, pues, un poco como sustituto a Kickstarter: el dinero que saque vendiendo el juego le ayudará a sacar adelante The Iconoclasts, y eso nos alegra mucho. Además de servirnos para descubrir un buen hacer que da esperanzas en que The Iconoclasts sea un gran juego, Noitu Love 2 es, también, un plataformas de acción en el que controlamos a Xoda Rap, a la que tenemos que llevar de un nivel a otro sobreviviendo a montones de robots malvados. La fórmula WASD para movernos más ratón para apuntar y atacar funciona más que bien: algunas mecánicas de niveles concretos no son tan intuitivas, pero el control de Xoda es ágil y es un placer patear traseros metálicos con ella en lo que acaba pareciendo un delirio de los mejores Treasure de la época de Super Nintendo. Además de Xoda, perdonadme por el spoiler, a medida que terminamos el juego vamos desbloqueando personajes nuevos con los que podemos volver a jugar. Además del cambio estético, cada personaje tiene sus peculiaridades que hacen que comenzar de nuevo, aunque no sea un juego especialmente largo, sea muy satisfactorio: muchas áreas parecen totalmente nuevas gracias a los ligeros cambios que se introducen en el diseño de niveles y, sobre todo, a las diferencias entre unos personajes y otros. Si a esto le añadimos las distintas dificultades, el reto que supone terminar el juego en las más difíciles y los secretos que vamos encontrando, Noitu Love 2 resulta ser algo más largo de lo que aparenta en una primera vuelta. Con Fez decíamos que su truco estético y referencial iba más allá de la pamplina nostálgica; en Noitu Love 2 también, pero menos: es un juego de 16 bits diseñado con la mentalidad de los 16 bits muy presente en todo momento, a pesar de que, claro, el control con el ratón siempre nos trae un poco al presente. «Intentad imaginar DE VERDAD que jugáis este juego en los 90. Con el ratón de Mario Paint», dice konkak en su web. 
Esa filosofía se nota, por ejemplo, en el diseño de niveles, que no es especialmente brillante pero sabe darnos momentos memorables. La mayoría de ellos vienen en forma de jefes finales, donde sí que hay un derroche de imaginación muy a tener en cuenta. Cada uno tiene una forma de ser eliminado distinta, y no se limita a uno por nivel: en cada una de las 7 pantallas encontramos varios jefes de mitad de fase, muchos de ellos geniales, además del jefe final, evidentemente más grandes y espectaculares y, en general, más difíciles de eliminar. Las limitaciones técnicas del juego, creado de una forma bastante rudimentaria (konjak es artista, no programador, al fin y al cabo), hacen que no haya logros ni demasiados añadidos en esta nueva versión para Steam, aunque algunos problemas de compatibilidad y cierres inesperados que al parecer sí se sufrían en las primeras versiones de 2008 aquí no existen. No me duele especialmente la falta de experiencia en programación de su creador: Noitu Love 2 es, al final, una experiencia estética de lujo para los fans de los 16 bits que sólo buscan eso, una réplica nostálgica de aquella forma de hacer juegos en el pasado. No es especialmente largo, ni será de los que recordemos con una sonrisa tonta durante años, pero Noitu Love 2: Devolution sí es suficientemente agradable como para soportar seis o siete vueltas, a pesar de los años, y también es cuatro euros bien invertidos para enriquecer nuestra biblioteca de Steam. Cualquier ayuda para que Joakim Sandberg tenga más facilidades para trabajar en The Iconoclasts es bienvenida; si de paso nos llevamos un buen juego para hacer la espera más llevadera, el negocio parece redondo. [7]
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Me recuerda un montón a mi querido Gunstar Heroes de la Megadrive… sólo por eso, para mi, ya merece la pena.
El otro día me lo regaló Konjak himself por el twitter. Lo jugué cuando salió y el otro día volví a jugarlo. Sigue siendo maravilloso. La única pega que le pongo es mi inutilidad para hacer double tapping con la mano izquierda en teclado.
Konjak es DIOS.
He provado la demo. Aunque me peta un poco los frames. El juego esta muy logrado. un 8/10