No sé si Puyo Puyo Tetris es un libro sobre un mismo tema escrito en dos idiomas distintos o uno sobre temas diferentes escrito en el mismo idioma. Aunque en Japón lleva unos años circulando (salió en 2014, y en tantas consolas como pudo: 3DS, Wii U, PS Vita, PlayStation 3 y 4, Xbox One), al viejo y aburrido Occidente ha llegado ahora, solo en PS4 y Switch, listo para aprovechar el hambre de lanzamientos que probablemente tenga cualquiera que se haya hecho en estos primeros meses con la nueva consola de Nintendo. Es una buena oportunidad para dedicarle a Puyo Puyo Tetris el tiempo necesario para aprender sus muchas sutilezas, las que tiene cada tipo de puzzle por separado y las que surgen cuando se mezclan y fusionan en los nuevos modos de juego.
Por si el título no es suficientemente descriptivo, Puyo Puyo Tetris reúne dos de esos arcades de puzzles que llevan con nosotros toda la vida en un único juego, y aprovecha la tesitura para trastear un poco con las reglas de cada juego proponiendo distintas maneras de enfrentarse a estos dos clásicos. Es un experimento que funciona mejor de lo que me podía haber imaginado; no solo porque hay muchas maneras de jugar por separado a Puyo Puyo y Tetris, con variantes que amplían o reducen el radio de acción de quien juega para proponer diferentes desafíos alrededor de dos juegos que tenemos más vistos que el tebeo.
Me parece algo con mucho mérito. El modo historia es un buen muestrario de estas maneras distintas de jugar que se desarrollan por completo en el multijugador, contra la máquina, contra amigos físicos o contra los superhéroes del online. A través de una historia sobre la que no sabría decir nada, se proponen diferentes retos (conseguir tal puntuación en determinado tiempo o líneas, derrotar a diferentes rivales, hacer tantos puntos a base de cadenas…) que sirven para practicar las mecánicas más básicas pero también las técnicas avanzadas, imprescindibles para superar los últimos mundos. No es una mala manera de, yendo a por las tres estrellas de cada nivel (en total hay cien, repartidos en diez mundos; siete forman la historia principal, y hay tres extra que en el original fueron DLC y aquí se desbloquean al terminar los anteriores), practicar en un entorno controlado la formación de cadenas o la fusión de Puyo Puyo y Tetris que da sentido a este matrimonio.
En el modo Fusion se cruzan en el mismo tablero puyos y tetrominos, y es una mezcla muy inteligente que convierte las partidas multijugador en batallas feroces donde los bloques basura van y vienen a un ritmo vertiginoso. Es un modo muy equilibrado en el que las combinaciones de líneas y cadenas son la clave: las piezas de Tetris destruyen bloques basura y caen directamente al fondo, atravesando y reconfigurando a los puyos; bien prevista esta combinación, es posible limpiar un porcentaje amplio del tablero con una sola pieza, convirtiendo la otra pantalla en un vertedero que puede echar a perder hasta la torre mejor calculada. El modo Swap anticipa estos malabarismos mentales para pasar de un juego a otro poniendo dos partidas en paralelo, que se activan y se ponen en espera cada equis segundos sin terminar de mezclarse; la forma más tradicional de jugar es el modo Versus, en el que cada persona elige qué juego prefiere. Son tres maneras de jugar que se suceden en el online, y que se pueden activar o desactivar a placer; es posible, por suerte, centrarse solo en un modo, aunque por defecto el matchmaking te lleva a cualquier partida que esté disponible.
Menciono lo de la desactivación de modos porque los dos restantes, Party y Big Bang, están un peldaño por debajo y acaso acaban estorbando cuando se intercalan con los otros. El primero añade ítems a la ecuación: además de los bloques basura, hay una serie de objetos que se utilizan haciendo línea con ellos (o haciendo una cadena con los puyos que tiene al lado) y que activan distintos estorbos o defensas. Una linterna que solo permite ver la parte del tablero que ilumina en ese momento, el rebote temporal de los bloques basura, una mayor capacidad defensiva; por lo general, estos ítems provocan un leve desequilibrio que solo encaja en momentos muy concretos, y no dentro de la competición más rígida de la Puzzle League, el modo online con puntuación. Big Bang, por su parte, lanza una serie infinita de patrones predefinidos que hay que resolver tan rápido como sea posible; cuando pasa un minuto, el juego hace recuento y resta una parte de la barra de vida de quien haya completado menos patrones. Suelen ser partidas un punto más largas de la cuenta y la variedad de patrones no ayuda a hacer que ese minuto sea menos interminable: como el modo Party, acaba resultando un poco desaborido entre las formas mejor pensadas de jugar a Puyo Puyo Tetris.
Suele gustarme llevar encima un Tetris, por lo que pueda pasar, y ese fue el primer interés que tuve en este Puyo Puyo Tetris, que no solo incluye una buena versión del juego de Pajitnov (una que se ve y suena bien, colorista y animada; con un reglamento similar al de Tetris DS, por mencionar el que suelo llevar encima, pero sin giros infinitos) sino que lo fusiona de manera muy inteligente con Puyo Puyo, otro clásico menos familiar en Occidente pero que hoy se hace más apetecible: Puyo Puyo Fever, la última entrega que se había publicado aquí hasta este, salió en 2004, cuando lo de jugar online no era tan común y era más difícil competir contra otras personas en vez de contra la máquina, que es donde realmente brilla el de los moquetes de colores. Una prueba más de que algunos juegos son para siempre. [8]
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Es cierto que el modo big bang es tedioso por lo largo que se hace como no sea que juegues contra un paquete, pero me sirvió para que le entraran las mecánicas básicas de tetris a uno de los sobris, para cuando se saque matrícula me atrevo a enseñarle como funciona el puyo xD
Me gustaría tanto que este juego fuera solo un poquitín más barato para tenerlo como «nuclear throne» de los próximos meses.
Todo lo que leo y escucho me gusta.
Buen análisis Víctor, complementa a la perfección la charla que diste en el podcast.
Es un buen juego,lo llevo jugando hace tiempo en vita, pero nunca he jugado contra alguien. Si tuviera la switch caeria seguro.
@landman
Y si juegas contra alguien de tu nivel es súper frustrante, demasiadas rondas y demasiados minutos. La idea es guay, para relajar la cabeza en el modo historia va bien.
Un must have de Switch.
A mí lo que me ha dejado loco era lo que comentabais en el podcast sobre que el modo historia incluye diálogos y demás parafernalia atípica en un juego de puzzles. Por lo demás está claro que es un juego que sale en Switch a un precio algo elevando y, aunque no debería ser un factor tan importante, a uno se le pasan las ganas de gastarse tanto en un Puyo Puyo y un Tetris.
Gracias PlayAsia por hacer que llegue a casa.
Amén
@servasky
En psvita llevo jugando ya un tiempo, asi que sin problemaa, eso si, solo hay version en japo, pero vamos que no hay mucho que leer
A los que dudais si gastaros 40 o esperar a que valga 30, a por el de cabeza,es un juego de 10 si teneis gente con quien jugar.
@servasky
Conéctate cualquier sábado por la mañana/mediodía para que los japoneses te den una tunda, puede que no encuentres muchos europeos, pero donde lo peta es en japón.
@drtenma
Atípico de un juego de puzles, pero una de las señas de identidad de los puyo puyo, que nació de un rpg con el que comparte personajes. El problema, claro está, es que aquí no conocemos a esos personajes, y la gracia es cero (que no digo que conociéndolos la historia mejore, sigue siendo una chorrada, pero si te hacen gracia los personajes puede que lo disfrutes más).
A falta de edición física del Wonder Boy, nos conformaremos con la lluvia de palitroques y moquetes.
Me atrae demasiado el jueguico pero temo engancharme cosa mala, así que de momento se queda en la reserva. Menos mal que en la Switch no hay descuentos porque si un día lo viera a 15-20 pavos en la eshop caía de cajón.
@landman
Pero al final así es como los conocerá todo el mundo, ¿no? Nunca he jugado un Puyo Puyo «de verdad» pero imagino que al igual que en este caso darán por sabidas muchas cosas pertenecientes al RPG y las intregas de los 90. En ese aspecto, hasta la audiencia japonesa «pierde».
Por otro lado, tienen unos diseños y personalidades muy coloridos y la tripulación de T es completamente nueva. Vamos, que con sus diálogos me lo pasé como un mico con la versión japonesa.
@cleses
Sí, es como dices, de hecho, Puyo Puyo Fever ya fue un reboot de la franquicia, aunque el primero que hizo Sega fue el de gba que tenía a los personajes clásicos (el primero que tuvimos en inglés, incluso el cartucho japonés llevaba inglés), con Fever ya hicieron un cast de personajes completamente nuevo, y este ha hecho bien en empezar mostrando tetris y personajes nuevos, y conocer al resto de tropa. Y de hecho Ringo y «su mundo» debutó en Puyo 7. Y en japón salió en diciembre Puyo Chronicle, que parece expandir más la historia con mapeados y exploración, aunque los combates siguen siendo a puyos (hubo uno en PSX similar), a mi no me importaría que se animaran a sacarlo por aquí.
Y los Madou no es que tuviesen una historia muy seria xD el último, el de Vita, salió por primera vez aquí como Sorcery Saga, y es prácticamente un remake de uno de los originales (como el de Saturn, que a su vez no se si era remake de otro más viejo), y el argumento es el de preparar una receta de curry WAHT los personajes son nuevos pero son todos substitutos: la prota es Arle con otro nombre, su mascota es otro Carbuncle, hay un clon de Schezo, de Rulue, de Satan/Dark Prince, etc etc, ya que sega se quedó con los derechos del puzle y de los personajes, pero no de madou monogatary,
que quedaron en Compile, que los recuperó Compile Heart en 2010.@landman
Madre mía qué locura. Esto es un lore profundo y no lo de los Souls.
@landman seguramente es un juego que se disfruta mucho más si conoces la saga, desde luego. Como dices a veces no es tan importante la historia en sí sino tenerle ya cariño a los personajes.
En la oficina estamos todos muy enganchados.