Hey, ¿os acordáis de 5th Cell? Son los del Scribblenauts. ¿Os acordáis de Scribblenauts? Muchos lo tendríais guardado en lo más profundo de vuestra memoria, ese lugar que reserváis para las cosas que queréis recordar pero no queréis que molesten, porque en verdad no fueron para tanto. 5th Cell lanzaron hace bien poco Run Roo Run, un juego para iOS en el que nos ponemos en el pellejo de un simpático canguro que debe ir desde Perth hasta Sydney, recorriendo Australia de punta a punta a saltos para rescatar a su novia o colega o hijo (la relación no queda del todo clara, aunque me decanto por la opción amorosa), de las garras del zoo. Run Roo Run llega con la lección bien aprendida: cualquiera que haya jugado a algún juego de iPhone en su vida reconocerá la estructura popularizada hasta la náusea por Angry Birds, la sencillez de planteamiento de Jetpack Joyride y las sesiones de juego mínimas y ágiles de, bueno, casi todos los juegos de móvil. El control no podría ser más sencillo: nuestro canguro avanza automáticamente y nosotros sólo tenemos que ocuparnos de, pulsando la pantalla, hacer que salte y no se coma los obstáculos que hay entre él y la línea de meta. En lugar de un desarrollo a lo Jetpack Joyride, Run Roo Run se divide en niveles muy cortos que plantean, cada uno, un pequeño reto distinto; en total son 420. Cuando digo pequeño reto no adjetivo porque sí: realmente son, en la mayoría de los casos, retos muy pequeños. El primer nivel sirve como toque de aviso: sólo hay que dar un salto y fin, nivel completado, medalla de oro. Los primeros trescientos y pico niveles no tienen demasiada ciencia; me los terminé en una hora y pico, todos con medalla de oro, pero, ¡atención, truco!, para rescatar a nuestro compañero no basta con esto: hay que terminar también la segunda vuelta, donde la dificultad aumenta considerablemente. No existe término medio: los niveles normales son casi insultantemente fáciles, y los extremos llegan a ser duros de verdad. Ningún problema con esto: los que quieran un reto mayor, ahí lo tienen. El problema de Run Roo Run es que es corto y su interés se desvanece pronto: no tardamos demasiado en terminar los niveles normales, la subida de dificultad está metida con calzador y resulta más incómoda que grata, y dudo bastante que nadie mantenga en la cabeza ningún nivel que quiera volver a jugar. El diseño de niveles es ingenioso en algunos momentos pero repetitivo y desaborido: la mayoría se parecen demasiado entre sí, y ninguno destaca lo suficiente como para mantenerlo en la cabeza mucho más tiempo que el que hemos tardado en terminarlo, esto es: entre dos y cinco segundos. Sí es sobresaliente artísticamente: los dibujos son formidables, la animación es muy agradable, los escenarios, aunque no demasiado variados, sí son muy coloristas y bonitos, y en general entra de maravilla por los ojos. Recuerda mucho a Scribblenauts, algo que no está de ninguna forma mal. La resolución de iPhone ayuda mucho a que todo tenga un aspecto especialmente radiante. Run Roo Run no es un mal juego, pero sí uno algo desaprovechado y con una duración que no tiene perdón. Suscita demasiada falta de interés; releyendo lo que escribí en su día sobre Scribblenauts, veo que quizá es un problema recurrente de 5th Cell: «Es adictivo, engancha y (…) sigues hasta que acaba; y no tarda demasiado en acabar», escribí, haciendo notar que su peor enemigo era «la indiferencia. El hecho de que su recuerdo me produzca más bostezos que ganas de volver a jugarlo dice mucho, pues, de él». A Run Roo Run le pasa lo mismo: se nota la intención, se nota el esfuerzo e incluso resultaría fácil recomendarlo, pero teniendo muy presente que no pasa de ser, por su condición radical de juego de usar y tirar, un intento fallido de producto de éxito para iOS. [5]
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Simplote, pero muy bonico.
los juegos en los que corres todo para alante solo y saltas (te agachas, golpeas, X) pulsando solo un botón creo que son el género más prolífico en smartphones (y me parecen todos o casi todos una puta mierda)
Con esto acabo de darme cuenta que siempre he (mal)creído que Ripper Roo del Crash era un perro
En general y por lo que he visto del juego, me parece muy acertada esta crítica.
@danup
Es un canguro-perro mutante azul.
Porque analizais esto y no el 1000 Heroz?
A todo esto, y el… superbrothers sword & sworcery?
Después de ver atentamente el vídeo siento que he perdido tres valiosos minutos con veintinueve segundos de mi vida.
Yo tenía intención de analizar el 1000 Heroz, pero estaba tan viciado que no podía dejar de jugar. Hasta que un día me cansé y ya no tenía ganas ni de analizarlo.