Desde ayer, Devil May Cry 5 tiene un nuevo modo de juego: el Palacio Sangriento, un clásico de la serie, que llega a esta nueva entrega apenas un mes después de su lanzamiento.
Para quien no lo conozca, el Palacio Sangriento es un modo en el que te enfrentas a diferentes grupos de enemigos que, nivel tras nivel, van sumando segundos al temporizador o arañándotelos; cada diez niveles hay uno «especial» (porque el grupo de enemigos es algo más complicado o porque es directamente uno de los jefes finales de la campaña) del que puedes sacar una jugosa cantidad de gemas rojas en función de lo lejos que estés del principio y de cuántos minutos y segundos tengas en el contador: como para sumar tiempo a buen ritmo hay que jugar bien (con estilo, sin que te hagan daño, etc.), el Palacio Sangriento viene a ser una versión muy depurada de la propuesta de Devil May Cry 5, en la que se elimina cualquier elemento que pueda distraerte del combate. Incluso el escenario, una sencilla plataforma en medio de la nada, parece estar mínimamente decorado por pura cortesía; en la campaña principal es posible disfrutar de la historia o los diálogos o la música, pero aquí solo se viene a combatir, a luchar, a pelear, a curtirle el lomo a los demoños.
En ese sentido, es la forma más pura de la intención de Hideaki Itsuno de «hacer un juego de acción en el que el jugador tenga capacidad de decisión sobre cómo derrotar a un enemigo, y de saber aprovechar los puntos fuertes de cada personaje para derrotar a ese enemigo», como nos comentaba en la entrevista que nos concedió en febrero de este año. En el Palacio Sangriento, tener ese conocimiento avanzado de las rutinas, manías y debilidades de cada uno de los enemigos que componen es importante; no para avanzar por los niveles, aunque también, sino para conseguir los mejores resultados, un objetivo que aquí tiene mucha más presencia que en la partida normal porque su importancia es hasta estratégica: incluso cuando no juegas particularmente bien (como es mi caso), ser capaz de acumular suficiente tiempo para enfrentarte a los jefes, por ejemplo, sin que el segundero te muerda el culo puede marcar la diferencia entre una partida apañada y una desastrosa.
El Palacio también se experimenta de maneras distintas en función del personaje que elijas. Con Nero, por ejemplo, cada diez niveles se te permite coger o cambiar Devil Breakers entre una selección que hay por el suelo; hay dos de cada, por lo que de manera sutil el juego te fuerza a tener cierta variedad de herramientas a tu disposición. Dante es el personaje más exigente, y esto se traslada al Palacio Sangriento: no le hace falta nada que no sean sus armas cuerpo a cuerpo y a distancia para ofrecer la experiencia más interesante, compleja y satisfactoria, aunque te obligue a tener presentes muchas más variables que sus compañeros. Por último, el recién llegado V da más o menos lo mismo que en la campaña: un tipo de combate único y sorprendente, que te obliga a tener en cuenta tu posición y la de tus aliados, que atacan siguiendo tus órdenes, lo que propicia un tipo de partida inédito en la serie y en el género. Además de inédito acaba resultando menos interesante, más repetitivo, agradable por la sobredosis de buenos resultados (confieso que ayer usé a V más veces de las que esperaba solo para hacer SSS con facilidad y equilibrar las patéticas partidas que, acostumbrado ya a Sekiro, hice con Dante y Nero) pero sin demasiado recorrido, o sea, justo lo contrario de lo que uno espera de cualquier personaje de un hack and slash.
Justo ese recorrido, esa agradable y agradecida complejidad que Dante y —en menor medida pero también más de lo que parece al principio— Nero aportan, hace que el Palacio Sangriento se aguante a pesar de que su propuesta es bastante más simple y parca de lo que la espera hizo esperar a parte de la comunidad. No hay modo cooperativo ni nuevos personajes a la vista; tampoco quiero pedirle peras al olmo, pero tampoco hay muchas otras cosas que podrían haber convertido el Palacio en un sitio en el que quedarse a vivir: rankings, repeticiones, apuestas, desbloqueables específicos… Tal como está ahora es un modo de juego estimulante para cierto tipo de jugadores avanzados que encuentren en sus 101 niveles y en su reto con un plus de exigencia (aquí no se puede continuar, claro: si palmas, empiezas desde el principio) un desafío interesante; con un par de toques aquí y allá podría atraer a mucha más gente, e incluso resultar más atractivo para precisamente esos jugadores avanzados que decía antes: la mayor parte de los primeros veinte niveles son enfrentamientos sin mucho interés ni dificultad, por ejemplo, una situación que en Devil May Cry 3 estaba mucho mejor resulta.
Tampoco quiero ser un quejica, porque lo cierto es que, aunque sí esperaba más, el Palacio Sangriento me ha servido para volver a Devil May Cry 5, para recordar (no ha costado mucho) por qué me gusta tanto y para comprobar que el nuevo modo sirve para farmear de manera muy agradable gemas rojas con las que comprar las mejoras que me faltan. No me hace falta más.
Qué decir sobre Devil May Cry 5 a estas alturas, ¿no? Es un juego casi milagroso que recoge el testigo de tantos juegos de tortas y trompazos de antaño y actualiza ese legado de una manera que hasta hace no mucho parecía imposible, sobre todo en un mundo de servicios, cajas de loot y experiencias pensadas a largo plazo. Sin cerrar la puerta a que se amplíe de cualquier manera, cuesta, teniendo en cuenta solo lo que viene por defecto en el disco, no hablar de «otro momento fuerte de una Capcom en racha»:
Devil May Cry 5 es uno de esos videojuegos que más que servir de ventana al futuro o al pasado o de nexo entre lo que ya dejamos atrás y lo que está por venir, como sí parecen querer ser tantos otros, solo parece trabajar unas ciertas cualidades y planteamientos que parecen tan esenciales y atemporales como las del mejor arte, y desde una posición tremendamente genuina y honesta.
Podéis leer el análisis completo aquí.
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@chiconuclear Esto, en Dmc 5 no hay farmeo,si farmeas es por que no usas bien Dr.Faust. o directamente no lo usas, por que aun usándolo mal en un combate con bastante enemigos te sacas 100.000 gemas, si lo usas guay puedes llegar a 500.000 por combate,no por nivel. No lo uso mucho y tengo todas las técnicas incluidas super burlas, 99 de cada brazo y como para infierno o infierno no sirven las gemas amarillas el dinero lo uso para tirarselo a los enemigos y matarlos XDDDDD
Lo del on line es sospechoso, no me creo que se hayan currado un modo cooperativo sólo para 1 nivel y 2 combates. Seria absurdo.
Por cierto, si hay recompensa por pasarse el bloody Palace. Lo de personajes extra, habrá, es casi seguro, la gente lo pide y el aprils fools Day precisamente jugo con eso.
@kassandra
Dr. Faust es literalmente farmeo hecho arma. Su única razón de ser es esa.
@chiconuclear
Bueno, su única razón no,como arma también es muy buena.
@kassandra
Pero existe para farmear gemas, bien para usar la propia Dr. Faust (que es cojonuda, sí), bien para comprar mejoras, y las burlas especiales cuestan tantas gemas para que el farmeo tenga recompensas claras. No es obligatorio farmear pero sí es algo que mucha gente quiere y querrá hacer, y el juego claramente te da opciones para hacerlo. El Palacio es una buena forma de hacerlo.
@chiconuclear
Nah, en realidad el palacio da sorprendente pocas gemas. Basicamente el bloody palace es sólo para fines lúdicos.
Gran noticia!!
Me apetece fuerte, pero el otro me consume el tiempo.
A donde se va el tiempo?
El GOTY sigue reforzandose.
Nah, este no será GOTY ni de coña. Será mejor juego de acción, de cajón.
@terbien
Parece que confundes GOTY con el ganador de los game awards.
DMC5 es mi juego del año.
@meheregistradohoy
Y el mío.
De vosotros dos, queridos frikazos del DMC, no esperaba otra cosa 😉
Yo me refería a un consenso general, no solo a los game awards. Así como ha habido consenso con GoW el año pasado.
Sabe dios que cuando acabe con el manco tengo pendiente la segunda vuelta, además de esto…el puto tiempo, joder
@terbien
Me paso los consensos generales por el forro de los cojones, no puede NUNCA haber un consenso general en internet, depende de los círculos en qué te muevas, el consenso general en anait ya es distinto del consenso general de twitter u otros sitios más mainstream.
Hablar de consejos generales a secas es, además de vacío, directamente mentira.
El año pasado no hubo consenso con GoW ni nada parecido, si lo hubiera habido no se hubiera sorprendido tanta gente de que ganara los Game Awards. Si tuviste la ilusión de que lo hubo es por lo que describí antes de que depende de los círculos donde estés.
Bueno, si tú quieres montarte tu película… Pos bueno, pos fale, pos malegro.
@meheregistradohoy
@terbien
Hombre, si es por Sekiro está lleno de diversidad de opiniones, y no sólo de Git Gud o fanboys que le daban el goty antes de salir y que se flipan con un detalle que tiene mientras ignoran antidetalles. Aparte que el juego tiene mogollón de reciclaje y tiene pocos niveles y,además de la miriada de defectos clásicos de Fs como el sistema de fijación o la cámara, más otros tantos que podría decir pero serían más subjetivos.
A Dmc en cambio no he visto críticas no cojonudas que no entren en » lo critico por ser hack slash » y el único defecto objetivo es que los escenarios no sean más variados y, subjetivamente, que no haya elección de pj una vez finalizado.
Pero sí, me fio de aquí, donde ven detalles únicos en cosas tan típicas como
SPOILER
Que si matas a alguien en el pasado muera en el presente
FIN SPOILER
Pero no ven cutradas como que si tienes un objeto de historia antes de tiempo no te dejan usarlo cuando toca y lo ignoran o que pongan bestias que los soldados enemigos las teman por qie ataquen a todo y luego les hace falta irse de cañas.
No entiendo exactamente qué intentas defender… nosequé de un «consenso» ? A quién carajo le puede importar semejante chorrada ? O.o
A mi eso si que me suena bastante a peliculita inventada jajajaja
PD: El verdadero GOTY es el Yoshi 😛
Ay el consenso, ese mullidito colchón cuando te válida, esa pandilla de ignorantes cuando te lleva la contraria.
A qué huelen los consensos?
Hacía bastante tiempo que no divertía tantísimo con un juego, me parece que conseguir y mantener SSS en los combates del palacio sangriento e ir llegando cada vez más lejos satisface mucho más que los parrys del Sekiro, así que para mí es el GOTY absoluto. Si pudieran hacer que en los combates con V no fuese tan fácil hacer rangos altos sin esfuerzo mejoraría mucho, porque mira que me gusta el personaje y la idea de su jugabiidad, pero se le podría dar una vueltita.
@terbien
La película te la estás montando tú.
Sigo manteniendo que hablar de consensos es algo vacío y que nunca jamás ha habido uno claro. Decir además que hubo claro consenso con GoW el año que salió RDR2 es de vivir debajo de una roca.
DMCV es un juego que para destacar no necesita putear al jugador, aun siendo Dante must die mas dificil que Sekiro con bastante.
DMC lo que hace es currarse un sistema de combate enorme, variado e infinito en posibilidades que funciona como un reloj de precisión suiza.
Sekiro es un juego de hacer parrys a trompicones de cámara con tu única arma mientras tiras petardos, mientras tanto Dante te aporrea la cabeza con dos motos, se teleporta a la cabeza de un bicho enorme le hacer 4 parrys seguidos, lo tira por el aire le mete un doble kalinna y mientras cae le recibe con un buen vacile antes de culminar la somanta de hostias con Cerberus.
No hay color.
@meheregistradohoy creo haber leido en una promo de Red Dead que tenian 70 GOTY de publicaciones, lo del consenso es una utopia.
@allevoy
Ciertamente.
Yo me aburri con el DmC 5 poco despues de empezar a jugar con Dante….
Para gustos colores…