En estos últimos tres años, casi cuatro en realidad, he estado involucrado en un proyecto de investigación cuyo objetivo era abordar la cultura del videojuego desde un punto de vista sociológico. La idea era —aún es— acercarme a temas de hondo calado social en la contemporaneidad, valiéndome para ello del videojuego y su cultura como un ámbito privilegiado para entender esas realidades: cuestiones como la agencia (del que di alguna pincelada en esta misma casa), la libertad, el poder, la experiencia, la empatía, la vida cotidiana, la cultura o la construcción de identidades y comunidades entraban dentro de mis preocupaciones. En el mundo del videojuego se reflejan muchas de las formulaciones contemporáneas de estas temáticas, es decir, a partir del videojuego es posible pensar cómo ese tipo de cuestiones se están estructurando en la actualidad. Pero no sólo es reflejo de unas tendencias socioculturales más amplias, también está participando activamente en ellas; de ahí su potencial: es parte constitutiva y constituyente de la realidad que nos ha tocado vivir en estas casi dos décadas que llevamos de siglo XXI.
ÍNDICE DE ARTÍCULOS
#1: El gamer prototípico: hardcore gamer o gamer subcultural
#2: Rompiendo la figura monolítica del gamer: casual gamer
#3: El gamer como foodie-connoisseur: el videojuego como cultura
#4: El (no-)gamer cultural-intelectual
#6: El acertijo: ¿Pero somos gamers o no?
#7: Apropiaciones gamer: los casos de Todas Gamers y Gaymer.es
De todos esos temas me gustaría centrarme en la cuestión de la identidad, una noción problemática desde un punto de vista teórico y polémica desde un enfoque sociopolítico y cultural. Siempre sujeta a controversias, es un campo que resulta fascinante a la hora de comprender dinámicas que nos afectan a todos y todas.
Por ello, este texto inaugura una serie de artículos centrada en la identidad gamer. Sí, soy consciente de que eso significa caminar sobre terreno resbaladizo, cuando no directamente saltar sobre un campo de minas. Sin embargo, creo que bordear el desfiladero de lo gamer puede dar sus frutos; en particular, entender mucho mejor cómo la identidad se construye, articula o, directamente, se deshace, en las sociedades que habitamos. La identidad gamer es poderosa porque se articula, en mayor o menor grado, tanto en claves política, cultural y social, como en otras más relacionadas con el consumo, lo lúdico y lo trivial. Puede ser tan sólida como volátil, y propugna adhesiones inquebrantables al mismo tiempo que facilita la promiscuidad identitaria. En ocasiones es etiqueta tan difusa que se torna ampliamente inclusiva, mientras que en otras es tan restrictiva que se erige en excluyente. La identidad gamer es, en muchos sentidos, un constructo límite; tanto, que puede llegar a desbordar la propia noción de identidad. Gamer es sin duda una categoría incómoda, y como tal, perfecta para observar cómo ciertos aspectos de lo social se hacen y deshacen. Es identidad, o lo que queda de ella, en proceso.
Esta serie de textos que se inicia aquí pretende ser un conjunto abierto, vivo. Es una suerte de experimento sociológico que opera a distintos niveles: primero, es un trabajo de divulgación de resultados de una investigación académica abierta a un público más amplio; segundo, es un espacio de debate en el que no sólo se transmiten unos resultados sino que se invita a discutirlos, a ponerlos en cuestión, a promover consensos y disensos; tercero, es un herramienta de investigación, pues la idea es que de este proceso se genere nuevo conocimiento del que todos seamos partícipes y probar así nuevas metodologías para acercarse a la realidad social (si vivimos en una sociedad altamente mediada por lo digital, ¿por qué no hacer uso de las oportunidades que nos ofrece?).
De hecho, de este experimento saldrá un nuevo documento (y sigue la rueda del conocimiento girando) que sintetizará todo el proceso: se trata de la publicación de un libro, bajo el sello AnaitGames, en el que se explorará la cuestión de la identidad gamer a partir de lo que ocurra desde ahora y a lo largo de las próximas semanas.
En este sentido, mi intención es ir incorporando en sucesivos textos las reacciones que surjan a raíz de este proceso, en cualquier formato, ya sea en los propios comentarios de esta web, la publicación de otros textos (hagan o no alusión a esta serie), comentarios en redes sociales, comunicaciones personales, etc. El número total de textos de esta serie, su contenido y forma dependerá, en gran medida, de la participación directa o indirecta del resto de la comunidad en el debate (también esto será importante para el libro que saldrá como resultado de todo este vaivén dialéctico). No obstante, adelanto una estructura mínima para la serie, una declaración de intenciones de lo que está por venir y que me gustaría abordar.
Los artículos en general versarán sobre las diversas (auto)definiciones de gamer que pueden extraerse de las entrevistas que llevé a cabo durante la investigación. Así, los primeros textos se articularán en torno a diversas categorías de gamer: (1) hardcore gamer (o gamer subcultural), (2) casual gamer, (3) gamer foodie-coinnosseur y (4) gamer intelectual-cultural. En total, cuatro tipos de gamer (o aproximaciones a su identidad).
Estos tipos de gamer, no obstante, han de entenderse antes que como categorías cerradas que tienen una correspondencia directa con la realidad, como herramientas analíticas para pensar las identidades que se construyen en torno al videojuego y su cultura. Vamos, lo que Weber entendía por «tipos ideales».
Estos cuatro textos constituyen, además, el punto de partida, más o menos desnudo, de la serie y de la discusión. Es el pistoletazo de salida de lo que debería espolear las aportaciones. Que esto tenga más o menos recorrido depende en gran medida de quienes estáis leyendo esto. De ahí seguirá un quinto texto en el que se discutirá la idea de que (5) todo el mundo es gamer. Es la apertura de la noción de gamer que conlleva no sólo una expansión de la categoría sino su potencial disolución en tanto que pierde capacidad discriminatoria. Se trataría de discutir si lo gamer también anuncia escenarios post-identitarios.
Y es ahí donde entraría la posibilidad de un sexto texto (digo posibilidad porque quizás antes de entrar en esta discusión habría otras cuestiones que abordar, como mostraré más abajo): (6) lo gamer como acertijo, como enigma (cuasi-)irresoluble. Gamer como identidad que no produce identidad. Quizás ahora la idea parezca algo críptica, pero espero que cuando lleguemos a su discusión tenga el sentido suficiente dentro de su carácter paradójico.
A partir de aquí todo es más difuso, pero me gustaría tratar ciertos temas en torno al concepto. Por ejemplo, un texto que se centrara en las reapropiaciones de la categoría gamer. Si en ocasiones se ha aplicado de forma excluyente, especialmente con ciertos sectores de la población a los que se ha apartado de su órbita (mujeres, colectivos LGTBI, ancianos, los casual), o ha sido utilizada para marginar o ridiculizar individuos y grupos (geeks, adolescentes), me gustaría abordar el modo en que esas personas y colectivos se ha reapropiado de la categoría ya sea para demarcar su identidad o para ocupar de forma reivindicativa su espacio. En otro de los textos se podría plantear una discusión de otros documentos, como artículos de difusión, de opinión, etc., que hubiesen surgido como parte de esta discusión o de forma independiente. Además, aparte de ir incorporando las aportaciones realizadas por los lectores en los sucesivos artículos de la serie, podrían surgir textos completamente nuevos dentro de la serie y centrados en algún aspecto o temática que hubiese adquirido especial relevancia durante la discusión, glosando algunas de las reacciones que suscite esta serie. Esto permitiría ampliar la reflexión y el debate, quién sabe si hasta el infinito (bueno, no; os aseguro que esta serie tendrá un fin; lo que hagáis con ella es cosa vuestra).
Antes de finalizar, unos breves apuntes metodológicos sobre las entrevistas realizadas. En el conjunto de la investigación realicé 28 entrevistas semi-estructuradas (en esta serie sólo se mencionarán los fragmentos de las entrevistas relevantes para el tema), principalmente a residentes en Reino Unido y España, aunque también hubo entrevistados de otros países europeos (Alemania, Suecia, Luxemburgo) y de Estados Unidos —hubo entrevistas cara a cara pero también vía Skype—. Los entrevistados fueron seleccionados siguiendo el criterio de incluir un amplio rango de roles y grupos dentro del mundo del videojuego (las categorías no son necesariamente excluyentes): jugadores, desarrolladores (diseñadores, programadores, artistas), académicos, periodistas de videojuegos, youtubers y directores de museos y centros de interpretación sobre videojuegos.
En relación con la categoría de jugadores de videojuegos, los entrevistados fueron elegidos de acuerdo a cómo ellos percibían su nivel de compromiso con la cultura del videojuego y a su propia identificación —o no— como gamers. Los casos se sitúan en una escala continua que va de aquellos que tienen una alta implicación en la cultura y se consideran gamers a aquellos menos activos y que no se identifican con la categoría gamer. Las entrevistas con miembros de la industria del videojuego fueron escogidas de acuerdo al rol que desempeñaban (productores, managers, programadores, diseñadores, artistas, marketing, atención al usuario) y al tipo de compañía (tamaño, si eran desarrolladores y/o editores) y de videojuegos con los que trabajaban (AAA, indie, juegos free-to-play). Los entrevistados categorizados como pertenecientes a los medios de comunicación fueron seleccionados en relación con el tipo primario de medio (escrito o audiovisual) y respecto al rol desempeñado (director, redactor, creador de contenidos). Finalmente también fueron entrevistados individuos que trabajaban en el sector de la cultura y el arte en relación con los videojuegos, entre ellos, directores de museos y otros centros de exhibición e interpretación del videojuego.
Respecto a los fragmentos de las entrevistas que aparecerán en los textos, sólo se realizará una descripción sociodemográfica del entrevistado/a, ya que todos los nombres utilizados son seudónimos. Los fragmentos de las entrevistas en inglés han sido traducidos directamente por mí. Además, aparte de otras técnicas autoetnográficas y de las entrevistas realizadas, también se siguieron debates en foros y redes sociales, por lo que es posible que aparezca alguna mención a estas discusiones durante la serie.
Desde ahora, como ya he hecho antes, os invito, lectoras y lectores de este texto, a comentar estas cuestiones a través de los medios que creías oportunos. Os estaré muy agradecido (¡o no!). Recordad: quizás vuestros comentarios queden inmortalizados en un artículo de esta web o, incluso, un libro. Empecemos.
Sobre el autor
Daniel Muriel. Doctor en Sociología por la Universidad del País Vasco. Actualmente es Investigador Postdoctoral en el Instituto de Estudios de Ocio (Universidad de Deusto). Ha investigado y publicado ampliamente sobre identidad, cultura, videojuegos, patrimonio cultural o juventud. En el ámbito académico es coautor del libro Video Games as Culture. Además, ha colaborado en webs de referencia del videojuego como Deus Ex Machina, AnaitGames, Presura, FS Gamer, Canino, Nivel Oculto y Zehngames.
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Muy buena pinta.
Siempre ha sido un aspecto que me ha resultado muy interesante y que pocas veces he visto abordado con seriedad o de manera suficientemente concienzuda.
Aún recuerdo un artículo de la Magazine 64, con personajes estilo South park, hablando de identidades gamer. Era superficial, cutre (y gracioso) y aún así lo sigo viendo como el mejor acercamiento.
Contad con mi interés y ganas.
A ver si comentarios y usuarios estamos a la altura.
(Algun dia se va a liar, seguro, forma parte de la experiencia, jaja)
Os besaba en los morros ahora
Muy interesante, mi identidad desea ser diseccionada. Donada queda a la ciencia
A la espera que se inicie este proceso/proyecto que me parece imnovador e interesante. Un saludo
Se lo va a pasar bien con Donald Trump.
Buenos días!!!
Antes de nada, me encanta la iniciativa de esta serie de artículos, enhorabuena, Anait siempre innovando. Desde luego, el videojuego, tiene una repercusión cultural en la actualidad que hace necesario este tipo de estudios, los cuales nos harán tener una perspectiva mucho más amplia de este fenómeno.
Por otro lado, me cuesta reconocerme en cualquiera de las cuatro «categorías» gamer con las que el autor intenta categorizar a aquellos que jugamos a videojuegos. Me explico, siempre he jugado unos cuantos juegos al año, normalmente una mezcla entre algunos indies y algunos triple A, a los que dedico menos tiempo de la inversión económica que realizo con ellos. La montaña de juegos sin terminar, o incluso sin empezar, que acumulo empieza a asustarme y el problema es que cada semana sale alguno que me interesa. Mis sesiones de juego son esporádicas, pero en ocasiones son muy largas o muchas cortas durantes unas cuantas semanas muy intensas. Este año, por ejemplo le di muy fuerte a Zelda BOTW, durante el primer mes desde que salió el juego, y luego le dí a unos cuantos indies, mientras también compre MK8 deluxe, ARMS, Persona V, Nier: Automata, … Persona V ha sido el siguiente juego al que le he dado con asiduidad durante el final del verano, y ayer mismo terminé Golf Story, prácticamente en un día, debido a una baja laboral.
En realidad, me apasionan los videojuegos, pero siento que cada vez tengo menos tiempo para dedicarles, y realmente siento que hoy por hoy están hechos para dedicarles ingentes cantidades de tiempo, bien por la dificultad que poseen (puedo que yo sea un manco, que también) o bien por la cantidad infinita de contenidos que tienen.
Mi pregunta es… ¿Qué tipo de gamer o en que categoría entrarían las personas como yo? Casi terminando la decada de los 30, con trabajo que le ocupa un tercio del día y que intenta compaginar con otras actividades socioculturales/deportivas (no veo la tele, y solo veo alguna serie de forma casual). Supongo que será respondida en las siguientes entregas de la serie.
Un saludo.
Interesantísimo esto. Estaré muy atento a cada artículo de la serie. Ya era hora que nos mirásemos al espejo para analizar lo que somos.
Por mi parte no me considero un «gamer» (y, para mí, ese término tiene ciertos matices negativos excluyentes) ni un jugador asiduo, pero aportaré en cada artículo mis propias vivencias y opiniones para enriquecer el debate, faltaría más.
Interesantisimo! Bravo por la iniciativa.
La idea es interesante. A la espera del primer texto y esperando poder aportar algo medianamente interesante xD
@carlosgargra
Buenos días!
Espero que en las entregas se vayan viendo los distintos matices de cada categoría. De todos modos, no hay que entenderlas como representaciones fieles de la realidad, sino más bien como tipos ideales. Quizás te puedas ver reflejado en aspectos de más de una categoría. En cualquier caso, también habrá espacio para entender la categoría gamer como algo mucho más abierto e indefinido. Pero bueno, en las próximas semanas espero que el debate crezca. Y lo importante es esto, que cada uno participe desde su propia experiencia.
¿En que categoría entran los ludópatas enganchados a los sobres del FIFA?
Una iniciativa estupenda y que encaja en Anait a la perfección.
En verdad es un tema muy complejo, ya que la mayoría de identidades que hacen tribu suelen estar mucho más definidas y confinadas. En este sentido, parece que los atributos de un gamer, están más cercanos a los de un cinéfilo o un deportista, más que a un heavie, un skater o un hippie, sin embargo a nivel de identidad (tanto en facetas incluyentes como excluyentes) siguen las dinámicas de estos últimos aunque carezcan de elementos estéticos identificativos (algo que creo que refuerza mucho la sensación de pertenencia al grupo).
Deseando leer los artículos de la serie y participar en las conversaciones.
Al margen del artículo en sí, que me leeré con más calma en casa, aplaudo esta huida del anonimato al adjuntar el perfil del articulista. Muy buen detalle, la verdad.
@danimuriel
Gracias por la pronta respuesta. Estoy seguro de que sí.
La verdad es que los últimos tiempos este «mundillo» está generando una serie de preguntas que son muy interesantes desde el punto de vista sociocultural. Y con ello me refiero por ejemplo al tema del loot de pago…
Anait siempre en cabeza de lo videojuerguista!
Por mi parte yo siempre he evitado utilizar la palabra gamer porque me parece una coletilla carente de significado, entendido como un significado más o menos unánime, lo que se dice aquí de las categorías vaya. Vamos, que si para cada uno significa una cosa no veo útil usar esa palabra para autodefinirse. Pero es que tampoco me gusta autodefinirme y tampoco me gusta usar aficciones para autodefinirse.
Y me recuerdas a Paquirrín aunque no sabría decir saber por qué, soy consciente de que es una gilipollez, creo que es la sonrisa.
@carlosgargra eres un tired gamer y cada vez somos más. Lo de que salgan tantos juegos que te interesan tan seguidos creo que es cosa de 2017, por eso no te preocupes.
@carlosgargra te doy un positivo porque no se pueden más, falta la categoría de los que no nos da la vida para jugar lo que querríamos 🙂
Muy buena pinta tiene todo esto.
Yo llevo mucho tiempo preguntándome sobre el tema y fijándome en las costumbres (tanto mías, como de la gente cercana a mí, que tienen gusto por los videojuegos), y al final llegué a la conclusión de que etiquetar a alguien en un género es erróneo, puesto que las formas, horas e ilusión dedicadas a jugar, varían según las épocas y circunstancias.
Saludos.
Qué buena pinta tiene esto y dónde si no aquí íbamos a poder verlo. Deseando leer el primer artículo.
@meheregistradohoy
Ostias, me has pillado! Daniel Muriel es mi alter ego cuando quiero hacer cosas pseudo-intelectuales! Después de esto saco nuevo single, espero que te lo compres.
Aparte de esto, la idea de gamer como carente de significado también se va a explorar en uno de los últimos textos, así que por ahí también hay tema de discusión.
Al leer el título me esperaba algo del estilo de algunos videos de Dayoscript pero también me parece interesante esto!
https://www.youtube.com/watch?v=7BdbfXSG2Pk
Me tiene intrigado esto y me encantaría poder aportar algo de valor. Veremos!
Me interesa bastante, pero el libro, no los artículos. Es una manía personal, pero es que me gusta tener recogido el texto íntegro en un solo formato.
Dicho lo cual a mí me interesa la relación del videojuego con la Historia y como escribe este medio sobre esta disciplina, así como la divulgación que se puede realizar de la Historia a través de un medio como el videojuego. Para aquél que esté interesado en el asunto le recomiendo esto: http://www.historiayvideojuegos.com, es literatura científica que no es del todo accesible, pero es un nicho académico bastante grande para historiadores, arqueólogos, antropólogos…
Proyectos como el que se presenta en esta web son muy necesarios para el videojuego, así que todo mi apoyo a Muriel, y por supuesto a Anait Games, me encanta el impulso que le está dando a este tipo de proyectos. Ya digo, en cuanto salga el libro me hago con él.
Expectante para empezar a leer el primer artículo y poder colaborar en todo lo que pueda.
Por cierto, con proyectos como estos es un gustazo ser patreon de esta santa casa.
Esto pinta muy interesante. Gran iniciativa!
@carlosgargra yo tb te entiendo pero con con diez años más (como mínimo) que tu. Pero en mi caso además de gustarle los videojuegos, también soy un deborador de libros, cómics, consumidor de series, y programador. Tengo que hacer auntenticos malabarismos para gestionar mi tiempo como buenamente puedo.
Entiendo la necesidad de categorizar sobre todo como punto de partida de un estudio, pero creo que son (o mejor dicho seremos) más aquellos que encajariamos en varias categorías o como mínimo en la que le factor tiempo determina nuestra implicación. Pero es grato que gente como @danimuriel, proponga este estudio para hacernos plantearnos a nosotros mismos.
Cuando era más joven me importaban esto de las etiquetas y categorizaciones ya que era necesarias para poder autodefinirme, pero con casi 40 años ahora mismo, me importa bine poco si encajo o no en una u otra, si no saber quien soy yo como persona y por tanto eso identifica mi identidad 😛
Muy buena pinta, aunque me uno a los que no les gusta el término «gamer», pero entiendo que algún término hay que usar para definir a este colectivo.
Hola,
Muy interesante el estudio.
Tenemos una tendencia un poco frustrarte (para mi al menos) de meterlo todo en cajitas separadas y etiquetadas. No puedo recordar un momento en mi vida en el que, de un modo u otro, no fuera jugadora de videojuegos pero no sé muy bien a que «caja» pertenezco… ni si quiero estar dentro de una.
Un saludo.
@mi_gato_es_developer
Yo ando por 37, también coleccionista de cómics y lector insaciable de libros, y, aunque siempre parezca que nos quejamos de falta de tiempo y todo el mundo piense distinto, profesor de instituto. No tengo tiempo ni para respirar si quiero hacer algo de deporte y hacer algún tipo de curso. Jodido tesoro que nunca se recupera…
Seguramente entremos en varias categorías a la vez, pero creo que en el fondo, y aunque parezca una perogrullada, gran parte de la industria vive del tipo de consumidor que somos nosotros. Porque debemos pensar, y quizás eso de para otro hilo diferente, no somos otra cosa más que consumidores de cara a las empresas.
Yo creo que soy el tipo que tiene ganas de jugar con videocacharros pero ni tiene tiempo, ni dinero y (casi) ni ganas y se pasa las horas viendo gameplays o análisis por lo youtuber.
Qué poco me gusta el término «gamer», pero supongo que este artículo significa que el término ya está arraigado y me lo tendré que comer con patatas ya para siempre.
Por lo demás tengo ganas de ver los siguientes artículos, a ver qué sale
Muy interesante, hacen falta estudios como estos.
En mi opinión, la opinión generalista aún considera a los gamers como raritos y excluyen a los videojuegos como parte de la cultura contemporánea. Me da mucha rabia, y lo comento con mis círculos, que se estén perdiendo maravillas narrativas, comunicativas e incluso informativas, por prejuicios.
A título personal, me considero gamer en tanto que intento estar al dia del mundo del videojuego y en cuanto puedo, juego. Aunque me asaltan las dudas de si realmente lo soy porque no puedo dedicarle el tiempo necesario… ¿En que momento se puede considerar a alguien gamer? ¿Es un factor que depende directamente de jugar o tan solo con mostrar interés vale?
Hacía un tiempo que no me paraba a comentar por aquí o en el foro por falta de tiempo, pero es un gran momento para volver. Esta iniciativa promete mucho.
A mi personalmente me interesa la distribución en categorias dentro de «gamer, y el criterio o criterios que se podrían llegar a utilizar para marcar diferencias, no se si de identidad, entre cada grupo. Digo que no sé si de identidad porque es muy interesante estudiar o comprobar como las personas dentro de cada categoría se ven a si mismos dentro de la gran pirámide, bajo el críterio de compromiso con el medio. «¿Cuánto compromiso crees que tienes con el medio, teniendo en cuenta tu forma de verlo y participar en él? ¿Cuanto crees que tiene esta otra categoria?» Sería interesante ver en que posición cree estar cada uno y en cual colocaría a los demás.
Ejemplo: un hardcore gamer, grupo a veces relacionado con una especie de discriminación a los que están por debajo en esa pirámide (casuals, aunque también otros grupos minoritarios), puede ser lo que consideramos hardcore pero no tener especial interés en los fines culturales, sociales o políticos del medio. Ante la pregunta mencionada más arriba, ¿se situará por encima de estos (académicos, teóricos, críticos) en la escala? Lo haga o no lo haga, ¿porque? Si es uno de los que están obsesionados con una posición de superioridad incluso en esto, ¿cómo afecta que sea probable que haya gente por encima, puestos a clasificar?
Quería plantea algunas ideas prematuramente, ya que no tengo ni idea de si están ya contempladas en el estudio o no. Tampoco se nada sobre sociología. Pero aquí las voy dejando, hay que participar, es importante.
Un abrazo a todos, y gracias a la redacción y a @danimuriel. Hay ganas de ver como se desarrolla esto.
<3
Pues muy interesado en lo que salga de aquí, vaya que sí. Intentaré seguirlo de cerca y aportar lo que buenamente pueda.
Pues tiene pintaza esto, aunque todo lo que podamos aportar en los comentarios va a estar un poco sesgado por el tipo de lectores que tiene Anait, aunque supongo que pasaría igual con cualquier otro sitio. Gran iniciativa, en cualquier caso.
PD: soy incapaz de hacerme una ligera idea de qué demonios puede ser un gamer foodie-coinnosseur.
Yo desde septiembre también estoy entre los sin tiempo con la tontería del trabajo me tiro casi 12 horas fuera de casa y he tenido que dejar aparte cosas que me gustaban y mi único refugio es viciarme los fines de semana y algún ratillo libre entre semana, no tengo ganas de mas
@rickenmcsuper Muchos más se hacen esas preguntas. En los textos se verán reflejadas esas cuestiones. Como las respondáis cada uno variará significativamente.
@ChusoMMontero ¡Chuso! Tu reflexión es muy interesante, y creo que encontrarás en los textos muchos puntos con los que podrás «dialogar» en este sentido. Cada vez estoy más seguro de que se va a establecer un debate apasionante. Espero que, eso sí, las pasiones no se desborden en exceso porque en algunos textos se muestran opiniones bastante «taxativas» (por decirlo de algún modo suave).
Mmm… Parece bastante interesante, aunque odio la palabra «gamer» con todas mis fuerzas.
No tengo nada claro eso de los «tipos de gamer». Quizás sería más interesante una propuesta similar a la de las inteligencias múltiples: no es que cada uno se encasille en un tipo de inteligencia, sino que todas esas inteligencias están en nosotros, más o menos desarrolladas.
De la misma manera, podríamos ver tipos de juegos, pero los jugadores no estarían encasillados en ni guna categoría, sino que pueden picar de cualquier combinación.
Por ejemplo, yo juego triples A, pero también indies más intelectuales y juegos casuales. Juego siempre que puedo, que suele ser unas 5-10 horas a la semana (ahora que tengo trabajo). Mi primo juega más bien a juegos indies, aunque de vez en cuando le da a algún triple A, y no suele irle el rollo intelectual, aunque sí que ha probado cosillas. Mi novia juega poco, casi siempre casual, pero alguna vez se ha bebido algún triple A.
En ese sentido, ninguno encajamos en ninguna categoría. No creo que exista la persona que SOLO juegat triple A, o solo juega indies, así que una propuesta similar a las inteligencias múltiples creo que sería más… Ajustada.
Sobre la muestra de 28 personas, no está mal para empezar y enfocar la investigación, pero para sacar conclusiones es un tamaño muestral muy bajo. Igual lo has dicho ya, pero en el movil no leo muy bien la web. Srry si ya habíais hablado de esto.
Por último, quería comentar una cosilla sobre la redacción: cuando un texto es académico, (seguro que ya lo ha oído mil veces y a lo mejor no lo has hecho propósito) tipo investigación, se puede utilizar el plural de modestia o una forma impersonal, pero no la primera persona del singular. Usar la primera persona del singular hace que el texto quede más amateur, más como un trabajo de instituto en vez de una investigación a publicar.
Igual es que soy muy quisquilloso, pero me ha rechinado mucho.
Espero que no se tome esto como un ataque sino como crítica constructiva. Estoy deseando ver las próximas entradas pronto.
El avatar de Ralph te viene al pelo.
Muy interesante artículo. Ansioso por leer los siguientes. En mi caso particular, la etiqueta de «gamer» suele ser confusa en el entorno en el cuál me manejo. La mayoría de las personas que se identifican con esta palabra que conozco podrían caer más en la definición de gamer hardcore (que todavía no se ha tipificado, pero ya me imagino por dónde va), mientras que yo caería entre gamer foodie-coinnosseur y gamer intelectual-cultural. Particularmente con la última categoría hay muchos conflictos, en especial en países donde la industria no se encuentra asentada, ni siquiera como parte del comercio. Cuesta mucho ser una persona que conoce, aprecia y reconoce el aporte cultural del medio en una sociedad que siquiera ha experimentado mucho de los juegos.
Tiene mucho potencial esta aproximación académica a algo tan turbio e indefinido como «lo gamer». Enhorabuena al autor por sacar adelante este experimento y a la redacción por alojarlo en esta casa.
De esta entrada me ha llamado la atención que sólo se propongan 4 categorías, por muy porosas que sean, para definir un concepto tan genérico como gamer. Como han apuntado más arriba – y llevamos tiempo viendo por aquí – cada vez hay más gente que se identifica como «ex-gamers» o «2nd hand gamers»: Gente que sigue muy interesada en el mundo de los videojuegos pero, por circunstancias de la vida, no tiene tiempo o ganas de jugarlos y se limita a seguir la actualidad del sector o leer los análisis a través de páginas como esta.
Me vienen también a la cabeza los «trvegamers», que asumen la cultura gamer (la de los tribales, las fantasías de poder y la competitividad) como parte de su identidad y viven los videojuegos como algo mucho mayor que un producto de consumo. También está la extensión de esto, los «progamers» y todo lo que rodea el mundo de los esports, o los «antigamers», que también tienen una relación con los videojuegos aunque sea de incomprensión y desprecio…
@carlosgargra
@meheregistradohoy
@molekiller
Si a todo eso sumais niños, y como en mi caso, bebés de un año, el tiempo se convierte en algo más preciado que el dinero. La putada es tener que dormir, mierda de seres metabólicos!
@leonighart Como ya he comentado antes, estas categorías (recordad que luego habría más textos) son más bien herramientas conceptuales que nos permiten pensar las diferentes aristas de la identidad gamer. Ni agota las posibilidades de definir tipos de gamer, ni pretenden ser categorías excluyentes. Y lo que me interesa es lo que comentas, vuestras propias experiencias y la de aquellos que tenéis cerca.
Por otra parte, la técnica utilizada fueron entrevistas personales semi-estructuradas en profundidad, que es una técnica de investigación cualitativa que difiere significativamente de la encuesta por ejemplo (generalmente cuantitativa). En este tipo de diseños no se busca representatividad estadística (sería imposible, digamos, incluso con una muestra «pequeña» de 1000-2000 personas, hacer entrevistas personales a tanta gente).
Y respecto al uso del plural mayestático o la primera persona del singular. Al menos en el ámbito de las ciencias sociales y humanidades, es bastante común (en las últimas décadas) usar la primera persona del singular si hay un sólo autor. Es más, hay revistas que te conminan explícitamente a que lo hagas. Esto es así porque usa ese tipo de plural impersonal es una especie de «trampa» para produce una distancia sobre lo dicho y darle más «objetividad» y autoridad a tus argumentos. Yo prefiero implicarme y hacerme cargo de lo que digo y que se vea desde dónde lo enuncio. Tal y como me gustaría que todos aquí bajasen «al barro» y hablen desde sus propias experiencias, sin ningún tipo de pretensión.
@robertpaulson Como acabo de decir, esas cuatro (y lo que viene) son fórmulas para pensar la identidad gamer, pero podría ser otras. Es más, muchas de las cosas que dices las verás reflejadas en los textos de esas categorías. Pero esto es lo que quiero, que cada uno vaya pensando lo gamer a su manera!
Ya han filtrado en NeoGAF el examen del primer trimestre:
@danimuriel
Muy buena iniciativa. Una pregunta: este debate en los comentarios, redes sociales… ¿Qué visibilidad tiene? Es decir, contarás únicamente con el feedback de los lectores de anait, o lo has propuesto también en otras comunidades (ya sean nacionales o no).
Buena suerte con el proyecto.
Este tipo de proyectos, ambiciosos y llevados a cabo por profesionales, otorgan al mundo del videojuego la profundidad que merece, además de ayudar a alejarlo de viejos estereotipos contra los que hemos luchado durante años.
Me parece genial que Anait apueste por ello. Y gracias al Dr Muriel por el tiempo dedicado.
Estaré atento a las entregas.
Esta me parece una de las iniciativas más interesantes y bonitas que ha parido la prensa de videojuegos española.
Que interesante, por mi lado quiero decir algunas cosas:
1.- No sé si se me pasó o si se insinúa y no alcancé a pillarlo: ¿Cual es el tiempo estimado para los procesos? ¿Cuando ves una publicación del libro?
2.- (una opinion muy personal) Me resulta importantísimo incluir el factor del tiempo: estamos en un periodo de la historia humana donde todo muta muy rápidamente, y me asustaría que este ejercicio pierda validez a futuro. Por lo cual me gustaría insistir en que esto debería ser enfocado como un corte diseccional del presente de la industria, como una fotografía del estado actual de las distintas generaciones jugonas. Y ademas proponer al final del experimento una sección sobre el futuro: ¿Cómo seremos los «gamers» en 30, 40, 50 años más? mira tú que sería guapo que en el 2077 (el año en el que caigan las bombas) nos leamos y veamos en qué pensabamos y en que no, a que le acertamos y en que estábamos completamente errados.
Anait, ahora además de la santa casa, es un laboratorio. Bravo!
En la lista de Geras está la respuesta a todas las interrogantes. Un Gamer es un pacificador o un pandiloco.
Un cometido admirable. ¡Tengo muchas ganas de leer lo que ya lleváis trabajado!
Holy
Mother
Of
Gaming
Muy grande. Enhorabuena por la iniciativa. Seguro que de aquí salen muy buenas conclusiones de las que se beneficiará seguro la industria (gamers incluidos).
@majinantonio Se va a tener en cuenta el debate que se produzca aquí pero también en redes sociales (twitter y facebook por ejemplo, pero también si se detecta en algún otro lugar). Eso sí, este «experimento» es una exclusiva de Anait. No lo he hecho en otros lugares (ni creo que lo haga; aunque sería muy interesante tener la oportunidad de hacerlo en el ámbito anglosajón). Así que se puede decir que es original 100%
@juancarloso 1-En principio saldrán dos textos por semana, y la cosa durará un mes más o menos. El libro ya es más difícil ponderar cuánto tardará, pero la idea es que salga lo ante posible una vez finalice la serie. Pero ahí entran en juego muchos factores, como por ejemplo, el volumen de participación en todo el proceso. O su complejidad. ¡O que yo me atasque en algún momento! Lo importante es que salga algo que refleje bien lo que aquí suceda y que sea de calidad. Espero que eso se cumpla. 2- El tiempo por supuesto que es fundamental. Teniendo en cuenta que la identidad gamer es un constructo relativamente reciente y tan controvertido (creo que eso ya se está empezando a ver con los primeros comentarios, es muy difícil poneros de acuerdo sobre qué significa ser gamer), imaginar como será (si es que sigue existiendo como noción viva) en 30, 40 o 50 años resulta muy complicado. Pero que cada uno proyecto lo que quiera!
Muy interesante!! Tengo especial interés en como defines las categorías de casual y hardcore y el debate que surge, porque cada vez pienso que se puede ser muy hardcore pero solo dedicarle tu tiempo a un juego o un género, aunque después no se tenga ni idea del resto del mundo de los videojocs. Pero a la vez pienso que no se puede considerar hardcore a alguien que solo juega al LOL, al FIFA o al Counter Strike, por mucho que le dedique 40 horas a la semana. Tengo la cabeza hecha un lío.
JODER. Contad conmigo!
PD: como os quiero AnaitGames
@tiago tranquilo, en unos años jugarás más, pero a los Lego, Minecraft, Skylanders………
Maravilloso proyecto y maravillosa forma de involucrar al personal.
A esto es a lo que me refiero: ¿existen acaso tipos de gamer?
Entiendo lo que quieres decir, pero creo que asignar categorías a algo que, en realidad,es posible que sea más bien espectral, puede ser contraproducente.
En cualquier caso, quizás el fondo de todo esto es que no termino de entender qué quieres decir con «identidad gamer» (dioses, cómo odio el anglicismo en general y éste en particular). ¿Existe una identidad ciclista o futbolista? Nuestros gustos y aficiones forman parte de nuestra identidad, pero no veo cómo pueden ser una identidad per sé.
Es lógico, entonces, que la muestra sea más pequeña, pero no veo cómo se pueden extrapolar conclusiones con un tamaño muestral tan pequeño. Es decir, si no hay análisis estadístico, no se puede afirmar que las conclusiones no sean resultado del azar o que valgan para cualquier sujeto fuera de la muestra.
Claro, la forma impersonal o el plural mayestático se utilizan para la explicación de observaciones, conceptos o conclusiones con un nivel de objetividad alto (no, no se puede ser totalmente objetivo. O mejor dicho, es difícil saber si se está siendo totalmente objetivo). La primera persona del singular, por el contrario, se utiliza para ideas, conjeturas u opiniones; es decir, cosas con un nivel de subjetividad alto.
A ver, para explicarlo con un ejemplo:
«He comprobado que la presión atmosférica al nivel del mar es de 1 atm. Aquí les dejo mis datos.»
«Se ha comprobado que la presión atmosférica al nivel del mar es de 1 atm. Aquí les dejo los datos.»
La diferencia es sutil, pero importante. Mientras en el primer caso el lector percibe esa observación como algo subjetivo al autor, que tiene validez porque él la ha observado, en el segundo caso el autor queda relegado a un segundo plano, y son los datos los que «demuestran» la hipótesis, no el observador. Al escribir de la segunda forma, al lector le queda claro que es de esta manera y no al revés.
No es que sea para dar una sensación de mayor objetividad, sino que es para diferenciar las explicaciones subjetivas de las, válgase la licencia, «objetivas».
PD: ANAIT un botón de «vista previa» para ayer, plz.
Mira, @danimuriel, a esto me refiero con lo de que puede ser contraproducente introducir (Bueno, o fomentar) el concepto de «tipos de gamer»
@leonighart La idea pasa por problematizar la noción de gamer en todos los sentidos, y eso espero que sea vea bastante bien a lo largo de los textos que abordan potenciales categorías de gamer pero también en aquellos en los que la propia noción de gamer se abre completamente.
En un diseño estadístico podríamos «contar» cuantas personas, por ejemplo, se identifican como gamer, pero eso nos seguiría dejando la duda de qué significa ser gamer (si es que eso es algo). Y no permitiría problematizar, pensar y discutir (o si lo hace lo haría de forma muy limitada). El enfoque cualitativo precisamente nos permite lo que ahora mismo estamos haciendo. Y fíjate, esa reflexión de @shalashaska sale casi calcada durante mis entrevistas. De hecho casi todo lo que ya ha empezado a salir por los comentarios tiene su reflejo en cosas que veréis en los textos (que después de todo no recogen todo lo dicho y son versiones bastante recortadas). Lo importante para mí es que empecemos a pensarnos a nosotros mismos,a comparar experiencias y a problematizar la idea de gamer que tanta presencia (de todo tipo) tiene el en mundo del videojuego.
Y bueno, no voy a entrar en el debate subjetivo-objetivo, que en sí mismo no llevaría a debates espistemológicos (y seguramente ontológicos) que creo que ahora despistarían de lo que se pretende hacer aquí. Pero digamos lo siguiente: los fragmentos de las entrevistas que aparecerán son, obviamente, datos que se extraen del trabajo de campo, pero el relato e interpretación que hago de ellos (incluida la selección de los fragmentos y el orden en el que aparecen) es algo que hago yo (en conversación con eso que me dicen y sin alterar eso que dicen, claro). Por lo tanto, en este caso prefiero usar la primera persona del singular. Y bueno, decir, «Se ha comprobado…», muy bien, pero está claro que alguien ha comprobado esa presión para ofrecer ese dato (o sea, lo que decía, estás introduciendo distancia con el lenguaje, pero el proceso ha sido el mismo). En realidad me parece una cuestión estilística y yo mismo suelo intercalar una y otra en muchas ocasiones, así que tampoco creo que sea un aspecto central a discutir.
@shalashaska Yo estoy como tú pero suelo concluir que da igual el término hardcore. Al final creo que todo gira entorno al gusto. No diré nunca que alguien es menos ‘gamer’ que yo por jugar al FIFA y al Gran Turismo al nivel que sea aunque yo juegue al Persona y al Zelda por ejemplo (por poner juegos considerados de masas en un caso).
Ídem con tiempo dedicado
PD: creo que podemos aprender muchísimo con este estudio
Creo que es la primera vez que veo un debate sobre la identidad gamer sin improperios, descalificativos y argumentativo surrealista que nada aporta a parte de estupidez y malos rollos. Más bien todo lo contrario, espero que perdure el ambiente constructivo y ya empieza a ser interesante el tema solo con la presentacion.
@mi_gato_es_developer Esperemos que la cosas siga así. En los textos se podrán leer fragmentos de entrevistas con opiniones»fuertes» sobre la cuestión gamer y espero que eso encienda un debate intenso pero sin caer en descalificaciones. En nuestra mano está que la discusión vaya por buenos cauces. Yo creo que es muy interesante y necesario pensar sobre lo gamer nos guste o no la etiqueta. Como dice @tylc, yo creo que podemos aprender mucho (yo el primero!).
Genial artículo e iniciativa! Tengo un artículo que escribí por ahí relacionado con el tema. Lo actualizaré y te lo pasaré por aquí o por mensaje si quieres!
@danimuriel mientras no llegan esos textos (ya faltamenos, yafaltamenos…) yo he de decir que no me siento gamer, teniendo en cuenta del uso del palabrejo sin comnotaciones negativas, juego a videojocs, y leo Anait, pero el resto de la «prensa» videojueguil, de momento no me despierta el interés. Pero estoy ansioso de leer lo que tienes en el horno.
Ufff, esto tiene una pinta bárbara, muy interesante el tema, y muy bueno el acercamiento.
@pontrox Pásalo por aquí, sin problemas. Se trata de compartir lo que cada uno quiera sobre el tema. 🙂
Maravilloso. Gamerece que no es poco.
@danimuriel
Entiendo. Pues sólo decir que estoy deseando que vayan saliendo los siguientes textos y que también creo que va a crear un debate muy interesante.
Un placer hablar contigo, la verdad.
Muy interesante esto. Me alegra que justo sea en Anait donde se haga esto :3
Por mi parte le tengo bastante asco al término gamer. No me gusta el palabro en sí ni las connotaciones que tiene. Pocas veces lo he visto abrazar sin un aire de superioridad bastante desagradable.
Al final este tipo de etiquetas creo que dividen más que unen.
Lo primero de todo, aplaudir la iniciativa. Como explicaré a continuación no acabo de ver claro este tipo de estudios en los que intentan desmenuzar toda actividad que haga uno, muchas veces las cosas son más que una simple suma de sus partes, pero sea como sea aplaudo este tipo de iniciativas por mucho que no acabe de comulgar con ellas.
Y como digo me rechina un poco el simple hecho de tener que analizar lo que es un «gamer». No sé, tengo 36 años, llevo en este mundillo desde los tiempos de los microordenadores y uno siempre ha jugado y punto. Y ojo, que este es el hobby de mi alma, amo los videojuegos como nada en este mundo, pero no entiendo la necesidad de analizar qué tipo de jugador eres, al igual que no entiendo la manía de un tiempo a esta parte de tener que considerar a los videojuegos «arte».
Supongo que son cosas de lo joven que es aún este medio y lo poblado que está de gente, precisamente, joven y por ello se sienta la necesidad de reafirmar que el hobby de uno «es guay» porque «soy un hardcore gamer jugando a la nueva expresión de arte del siglo XXI, los videojuegos», pero desde mi punto de vista esto es mucho más sencillo que todo eso, uno juega y punto.
Y ojo, me encanta leer sobre videojuegos, pero eso, sobre videojuegos, no sobre todo lo que los rodean, que de un tiempo a esta parte me da un poco de asquete por lo artificial y forzado que lo veo.
Sea como seguiré con atención todos y cada uno de estos artículos y quien sabe, a lo mejor dentro de unas semanas pienso todo lo contrario y me retracto de todo lo escrito arriba.
Estoy poniéndome al día con las lecturas pendientes. Muy interesante el proyecto, suerte y adelante con ello!