Take a drink from his special cup, Doctor Mario

Mes Mini #8: Dr. Mario

Mes Mini #8: Dr. Mario

No sé si el inmovilismo de Dr. Mario tiene que ver con el respeto a su diseñador (Gunpei Yokoi, el hombre detrás de la Game Boy original) o con el miedo a tocar algo y que el edificio entero se desmorone. Hace más o menos un año se publicó la última entrega, Dr. Mario: Miracle Cure, el sexto juego de la serie en veintiséis años; no se puede hablar de sobreexplotación, aunque la fórmula resulte menos estimulante hoy que en su momento. Lo importante es que funciona igual de bien o de mal que en 1990.

Mes Mini #8: Dr. MarioO que en 1989, para el caso. Las normas básicas estaban ahí: formando grupos de cuatro o más unidades entre los virus que hay en pantalla y las píldoras que, como si fuera piezas de Tetris, va dejando caer el veterinario Mario. ¡El veterimario! Esta es una de las peculiaridades de Virus, el primer prototipo de Dr. Mario del que se tiene constancia; en esta versión, la lupa que muestra en detalle a los virus en la zona izquierda de la pantalla todavía no existe, y en su lugar hay una viñeta que muestra al paciente: un bulldog inglés visiblemente afectado por la gripe, como se deduce de sus frecuentes estornudos y de la enfermera que sujeta una bolsa de hielo sobre su cabeza para bajar la fiebre. (Una práctica relativamente popular, como demuestra esta irresistible búsqueda en Google.) Es un detalle menor pero que aporta nuevos datos sobre la turbulenta relación de Mario con los animales: sus trifulcas con Donkey Kong y su hijo no parecen propias de un veterinario que ha tenido que hacer un juramento hipocrático.

(En el manual de instrucciones que acabó saliendo con el juego, se explica que Mario trabaja en el «laboratorio de investigación del Hospital del Reino Champiñón», y los puzzles se justifican hablando de un experimento «fuera de control» que Mario resuelve con «una nueva vitamina» que ha desarrollado. Mucho menos interesante.)

Pero más allá de eso y de algunas opciones que no llegaron a la versión final (para controlar, por ejemplo, si las mitades de pastilla que quedan sueltas caen hacia el fondo o no, o el número de rondas de una partida multijugador; en otro prototipo, como curiosidad, el selector de dificultad no se identificaba como speed, sino como sick level, un ramalazo dramático bastante bien pensado), el juego es el mismo. Uno de los motivos que se me ocurren (comprobable en cualquier versión que se ha lanzado hasta el momento) es que por su planteamiento, quizá inspirado en los obstáculos aleatorios que aparecen en Tetris con el selector de altura del modo B, es un juego que puede proponer desafíos ligeramente distintos en cada partida, y hacer planes es bastante más difícil que en el de Pajitnov. Al desafío infinito de Tetris se le oponen aquí los niveles individuales con distintos grados de dificultad, que se manifiestan en el número de virus con el que comienza la partida; recuerda a variantes más enfocadas en la acción, como Tetris Blast o Puzzle League, con el que, de hecho, ha formado equipo varias veces: en Dr. Mario & Puzzle League, para Game Boy Advance, y en Nintendo Puzzle Collection, para GameCube, que tristemente no salió de Japón.

Mes Mini #8: Dr. Mario

Volviendo al Dr. Mario de NES, su sencillez me ha decepcionado pero también me he sorprendido a mí mismo intentando superar mis puntuaciones sin casi proponérmelo: quiero decir que se me vienen a la cabeza formas de hacerlo distinto (añadiendo algo de profundidad en las puntuaciones, por ejemplo), pero en realidad entiendo y respeto las intenciones de Yokoi. Las adiciones posteriores no han mejorado Dr. Mario; ni las pastillas con otras formas ni los modos de juego adicionales de entregas posteriores lo mejoran: no lo empeoran, pero desde luego no lo hacen mejor. Supongo que eso dice algo sobre el original de NES. Ya en esta primera entrega se tenían en cuenta más cosas de las que se puede ver en una primera partida individual: las reacciones en cadena, por ejemplo, no sirven para tanto cuando se juega en solitario, pero sí tienen un papel importante en el multijugador, donde sirven para molestar al rival añadiendo obstáculos a su pantalla.

Dr. Mario es, también, el primer juego que me ha hecho sentir algo parecido a la nostalgia: he recordado con cariño las muchas horas que jugué a la versión de Game Boy, habitual en esos cartuchos de 32 en 1 omnipresentes en mi entorno en la década de los 90. Creo que Dr. Mario simboliza bien la manera que tiene Nintendo de trabajar y mantener vivos algunos de sus juegos sin necesariamente repensarlos o presentarlos de otra manera. Por muchos añadidos que haya, el Dr. Mario de NES está en las siguientes entregas, tal cual fue concebido en su día. Se nota la mano del Gunpei Yokoi de la Ultra Hand, uno de los juguetes de éxito de la Nintendo de los 60; el mismo que transformó la idea de juguetear con los botones de una calculadora en la Game & Watch, otro juguete que anticipa la Game Boy (también de Yokoi), y después en la cruceta del mando de NES, con ese tacto de juguete que se sigue buscando en Wii U. Alguna vez he pensado que Nintendo solo saca nuevos Dr. Mario para justificar su presencia en Super Smash Bros., pero en realidad creo que tiene que ver con ese respeto al diseñador y ese miedo a romper algo que funciona de los que hablaba al principio. Es una filosofía imposible que, creo, hace que Nintendo parezca habitar otro plano de la realidad del videojuego: a eso me refiero cuando hablo de Nintendo como juguetería.

Esa candidez del juguete está en el núcleo de Dr. Mario; puede que por eso casi nadie haya pensado en él, a pesar del tirón de los puzzles en Google Play y la App Store, como candidato para esta nueva etapa de Nintendo en el mercado de los juegos para smartphone.

Mes Mini #8: Dr. Mario

* * *

(En la Video Game Bible de Andy Slaven se dice que algunas asociaciones de padres reaccionaron negativamente a Dr. Mario, porque «no estaban de acuerdo con el uso de la medicina en el juego»; inevitablemente he pensado en Akira, de Katsuhiro Otomo, contemporánea a Dr. Mario tanto en manga como en anime. Me acuerdo del uso alegre de las píldoras y en el tremendo eslogan good for health, bad for education, que en Akira es una forma provocativa de describir las drogas y que en el año 90 casi podría describir a los videojuegos.)


Aprovechando el lanzamiento de NES Mini, repasamos sus treinta juegos dando pinceladas de sus desarrollos, su repercusión y lo que podemos aprender de ellos hoy. Un nuevo artículo cada día, de lunes a domingo.

  1. Deses

    Pues eso de que Mario haya estado a puntito de ser el responsable de causar une epidemia me mola.

    @estanis_belmont
    Y el original que es a lo que yo venía de todos modos.
    https://www.youtube.com/watch?v=pc-EP-0xEDQ

  2. DrTenma

    Lo del perro en el prototipo de Dr. Mario abre una puerta muy chunga entre Mario y los animales, ciertamente xD Yo lo jugué también en la Gameboy por primera vez, pero me vicié más con el Dr Wario que traía el ‘Wario Ware’

  3. Diegodc

    Me esta volviendo muy loco este especial @chiconuclear, @pinjed y no había tenido tiempo de decíroslo antes, que ando absorbido por el trabajo.
    Puta enhorabuena. Da gusto.

    Con respecto al juego, nunca fui fan. De hecho una vez estuve a punto de comprarlo pensando que era un Mario normal (era muy, muy pequeño) y por no elegir éste, acabe con el Yoshi’s Cookie (hablando de GB aquí ), que devolví amablemente a mi abuela también.

  4. Richi

    Es curioso el sprite de la enfermera al lado del perro

  5. Epetekaun

    Yo juegue muchísimo a este juego en su época, pero a la versión de la Game Boy. Hoy en día le sigo dando kaña en la 3DS. Un juego muy divertido.

  6. Andy

    Mi novia es pro de doctor mario.

  7. Harukiya

    Referencias a Akira FTW

  8. AdrianXunkeira

    En la uni teníamos una PSX con emulador de NES y las pachangas en los botellones al Dr. Mario eran épicas, no jugábamos a otra cosa.

  9. Richi

    @petete_torete lo parece xd. Es curioso que hayan decidido hacerla así en vez de usar el negro para la misma línea

  10. Tiago

    @petete_torete
    He tenido q subir la pantalla del telefono para ver el dibujo, será que estoy enfermo??

  11. Rocks

    @chiconuclear dijo:
    Me acuerdo del uso alegre de las píldoras y en el tremendo eslogan good for health, bad for education, que en Akira es una forma provocativa de describir las drogas y que en el año 90 casi podría describir a los videojuegos.

    De aquí puede salir un artículo muy interesante.

  12. Víctor Martínez

    @rocksgt
    Me pasé dos días buscando información para que este artículo fuera sobre eso, pero no encontré suficiente documentación como para justificarlo más allá de la paja mental XD (Ahora sé un poco más sobre la industria farmacéutica de Japón.)

  13. Rocks

    @chiconuclear
    Yo estaba pensando también en el famoso «Winners don’t use drugs», que siempre me flipó esa asociación tan visible.
    No sabría bien cómo enfocarlo, pero años 90, drogas y salones recreativos da para articulazo seguro.