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La Biblioteca Nacional de España incluye al videojuego entre sus formatos a conservar

La Biblioteca Nacional de España incluye al videojuego entre sus formatos a conservar

La directora de la Biblioteca Nacional de España, Ana Santos, ha hecho llegar al subsecretario en funciones del Ministerio de Cultura y Deporte, Javier García Fernández, una propuesta que añade los videojuegos, las páginas web o la propaganda electoral a los bienes de interés cultural de cuya conservación se podría encargar su institución, según leemos en El País.

Esta nueva ley sumaría a los formatos que ya se catalogan y conservan en la Biblioteca Nacional otros nuevos y más cercanos a la realidad actual, a la vez que se deshace de algunas de las llamadas «microformas» que ha almacenado hasta hoy, como pasatiempos, crucigramas, sudokus o sopas de letras. La Biblioteca Nacional se encarga de recopilar, almacenar y conservar el patrimonio bibliográfico y documental español, donde se encuentran los libros o revistas que se publican en España pero también documentos audiovisuales, carteles, postales, fotografías o naipes, entre otros.

En palabras de Santos, «los videojuegos serán bien de interés cultural en el futuro, porque tienen un valor cultural importantísimo como creación artística», y de ahí la importancia de mantener un catálogo y conservar copias. «Aunque quizá ahora no les demos mucho valor, son nuevos materiales que debemos conservar».

Entre las dificultades que presenta la conservación de videojuegos se encuentra el hecho de que, por ley, solo están obligados a entregar copias de sus obras a la Biblioteca Nacional los editores españoles, y no son tantos los videojuegos que se editan en España. La propia realidad del desarrollo de videojuegos dificulta las cosas, porque en algunos casos aunque la mano de obra sea española el trabajo puede tener otras nacionalidades; se me ocurre el caso de Metroid: Samus Returns, madrileño como el bocata de calamares y japonés como el tamagoyaki.

Santos lamentó también, en declaraciones a El País, la falta de medios con que cuenta la Biblioteca Nacional para hacer frente a la conservación del conocimiento digital, aunque celebra los buenos resultados que han dado algunas iniciativas recientes, como la creación de grupos de «conservadores web» que, repartidos por España, se encargan de seleccionar qué contenidos merecen ser integrados en los archivos de la Biblioteca. «Estos equipos ayudan a dar coherencia a las colecciones, porque definen qué es lo que interesa conservar», explicó Santos, algo esencial —junto con el trabajo necesario por parte de las comunidades autónomas, reflejado también en la nueva propuesta— para «lograr la mejor representatividad del mundo de Internet».

  1. Cyberrb25

    Ojalá que esta política se promueva a nivel europeo o incluso internacional para que haya una posibilidad de hacer fuerza y poder pedir no sólo obras lanzadas en territorio nacional/europeo, si no a nivel mundial.

    Tanto para videojuegos como cine, narrativa escrita, arte visual, etc.

  2. Pequebu

    una propuesta que añade[…]la propaganda electoral

    😕

    a la vez que se deshace de algunas de las llamadas «microformas» que ha almacenado hasta hoy, como pasatiempos, crucigramas, sudokus o sopas de letras

    😕

    Me parece que estos dos extractos resumen el cariz y la trascendencia real de esta propuesta, o si se quiere, del propio fenómeno de la conservación de bienes de interés por parte de la Biblioteca nacional. Además, que en la era digital, y en concreto con un tipo de obra como el videojuego tampoco parece que tenga mayor relevancia que esto se haga o se deje de hacer, ¿no? Más allá de lo que signifique como reconocimiento institucional del videojuego como forma de expresión cultural o artística, que llega ya con un pelín de retraso.

  3. Rustgladiator

    Cuando el mundo sea fuego y dragones solo nos quedarán los juegos de nintendo que no necesitan parches de nada para poder jugar tranquilos