Child of Eden también podrá jugarse con un pad

Estáis de suerte todos aquellos pastilleros degenerados que lleváis toda la noche tocándoos y soñando con el recién desvelado hijo bastardo de Rez, el bello Child of Eden que ayer presentó Ubisoft. Si en vuestro subconsciente la única mancha negra era que el juego requiriera haceros con el cacharro de marras para poder jugarlo, ya podéis respirar tranquilos: Kinect no es imprescindible. Por lo visto, los chicos de Joystiq han parado a Tetsuya Mizuguchi en las escaleras mecánicas del E3, le han colocado en el rostro un trapo con cloroformo y se han llevado su cuerpo inerte por una salida de emergencia sólo para despertarle a bofetadas y preguntarle si sería posible jugar con un pad a su nuevo vástago. Su respuesta fue afirmativa vino acompañada de la confirmación de que la vibración del mando seguiría el ritmo de la música. Además, Mizuguchi asintió sobre el hecho de que jugarlo con Kinect aportaría menos «feedback» al jugador al no haber contacto físico con nada, y añadió que quizá se añadan unas pulseras vibratorias para maximizar la experiencia. Sobre un lanzamiento para PS3 con Move, Tetsuya aseguró que aún tenía que decidirse.