De los creadores de Drawn to Life, llega Scribblenauts

WOW. No, en serio, WOW. Y no me refiero a esa especie de dronja virtual en forma de orcos y elfos apalizándose, sino a auténtica admiración. No en vano, 5th Cell ya eran expertos en lograr hacer lo imposible, pues hace años crearon una franquicia completamente nueva y original y triunfaron con ella sin el apoyo de grandes nombres ni grandes presupuestos. Y hoy, en vez de hacer una secuela, han hecho Scribblenauts, un juego con un concepto que ríanse usted de Molyneux. Atención: Imaginad un juego de aventuras/puzzles en 2D con visión lateral para la DS. Ahora imaginad que en dicho juego tienes el poder de escribir cualquier cosa, haciendo que dicha cosa aparezca en pantalla e interactúe con cualquier otro objeto mediante un sistema de físicas. Por ejemplo: podemos escribir «escalera» para ir a lo alto de un árbol, o escribir «hacha» para cortarlo y que lo alto del árbol venga a nosotros. Y, según sus creadores, cuando dicen cualquier cosa, se están refiriendo a absolutamente cualquiera de los 60.000 sustantivos del inglés referidos a objetos físicos salvo términos con copyright u obscenidades (nuestra armada de penes borrachos con iPhones tendrá que esperar), en un auténtico alarde de programación semántica. Y es que para lograr meter semejante cantida de información en la DS, han usado un par de trucos la mar de ingeniosos: por un lado, un estilo gráfico más bien simplote para que todos los objetos cupieran en la DS, y por otro, la madre de todos los árboles semánticos, con una base de datos sobre las propiedades de cada objeto y cuáles comparten o difieren los unos de los otros. A-C-O-J-O-N-A-N-T-E, máxime cuando los propios creadores del juego lo explican y confirman que no se trata de una bravuconada para poner en los anuncios sino de un resultado palpable, fruto de años de trabajo a la hora de catalogar el lenguaje. Yo lo siento, pero necesito quitarme el sombrero ante semejante muestra de ambición y corte de mangas a la secuelitis. Si cumplen todo lo prometido, 5th Cell habrá demostrado otra vez más, que el ingenio vence a cualquier superproducción, incluso en un medio como el nuestro. Bravo, maldita sea, bravo.