El equipo de desarrollo de Warface se independiza de Crytek y se convierte en Blackwood Games

Crytek sigue aligerándose con el paso del tiempo: en diciembre de 2016 cerraron la friolera de cinco estudios en Europa y Asia, y tres meses después vendieron a Sega y Creative Assembly su estudio Crytek Black Sea. Hoy nos enteramos de que el equipo responsable del desarrollo del shooter free-to-play Warface, que es parte de Crytek Kiev, ha decidido escindirse de las oficinas que la compañía alemana tiene en Ucrania y formar su propia empresa desarrolladora, Blackwood Games, llevándose además consigo el propio Warface. El acuerdo, al menos de cara a la prensa, parece que ha sido amistoso. Por un lado tenemos al director creativo del juego, Michael Khaimzon, que parece que de momento será el líder del nuevo estudio, hablando de este movimiento drástico: «Ha sido una decisión dura dejar Crytek después de todos estos años, pero a veces hay que cambiar para evolucionar. Es muy importante para nosotros centrarnos en desarrollar Warface de una manera que satisfaga las expectativas de los jugadores. Hemos mantenido el equipo de desarrollo intacto, y su experiencia nos permitirá seguir adelante con nuestros planes e ideas. Estamos muy agradecidos a Crytek por estos fantásticos años juntos y por su encomiable apoyo en este movimiento». Y por otro tenemos a Avni Yerli, actual co-presidente de Crytek junto a su hermano Faruk (Cevat, el tercer hermano presidente en discordia, dejó el puesto hace un año), aparentemente contento con la operación: «El equipo de desarrollo de Warface siempre ha sido una inspiración para nosotros. Hacerse independientes con la idea de crear una relación más cercana con la distribuidora es un movimiento estratégico que, estamos todos de acuerdo, es lo mejor para el futuro del juego. Al mismo tiempo, esta reorganización nos permitirá centrarnos en nuestras IPs propias y planear a largo plazo». Supongo que con esas IPs se refieren única y exclusivamente a Hunt: Showdown, el shooter cooperativo y competitivo con aires de survival horror que salió en Early Access hace justo un año y que tiene pendiente su llegada al programa Game Preview de Xbox One en algún momento de este 2019. El resto de franquicias que les hicieron famosos no son suyas: Far Cry es de Ubisoft y Crysis es de Electronic Arts. Solo quedaría en el tintero Ryse, que en teoría sigue en propiedad de Crytek y de hecho no tiene una secuela, dicen los rumores, porque Microsoft puso como condición para financiar un hipotético Ryse 2 quedarse con la IP y el estudio germano se negó en redondo y rompió las negociaciones. Ahora sin Warface, parece que se lo juegan todo a una carta. Por parte de Blackwood Games, la operación les acerca un poco más a su socio en la distribución en PC, My.com, que es la subsidiaria internacional del grupo ruso Mail.Ru, y que hasta hace poco solo se hacía cargo de la publicación del juego en Rusia y países colindantes. Hace algún tiempo My.com se hizo finalmente con los derechos de distribución también en Europa y Norteamérica, que hasta entonces se repartían entre Trion Worlds y la propia Crytek.