Y ahora, ¿quién está jugando a Pokémon?

Bienvenidos a la Era de las Burbujas. La Burbuja de las Ensaladas de Patata, la Burbuja de los Simuladores. La Burbuja de Jugar a Pokémon: en el streaming de Twitch que tenéis arriba, podéis ver cómo un pez juega a Pokémon Rojo en directo.

El experimento, que replica el famoso Twitch Plays Pokémon de principios de año, básicamente va así: una cámara graba una pecera constantemente, y la imagen de la cámara está dividida en una serie de zonas; cada zona representa un botón, y en función de por dónde se mueva el pez se pulsa un botón u otro de la Game Boy. De esta manera, en 170 horas Grayson Hopper (así se llama el pez, un luchador de Siam bastante bonito) ha conseguido salir de casa, conseguir un Charmander, al que ha puesto como mote AAAABBK, y ha vencido al Squirtle de su rival. 

Ahora mismo, lleva un buen rato mirando un lago, quién sabe si pensando que acabará saliendo algún Magikarp. Pero pensemos que es un puto pez, y que ha conseguido llevar al protagonista hasta el Profesor Oak, hacerse con un Pokémon y terminar con éxito un combate.

Casi 2.000 personas están viendo a Grayson jugar a Pokémon. Viendo a un pez jugar: al contrario que en Twitch Plays Pokémon, aquí la interacción es nula; es el pez el que decide qué hacer, no la comunidad que se ha formado a su alrededor.

Porque se ha formado una comunidad, claro. Catherine Moresco, la inventora, junto con Patrick Facheris, de esta pequeña locura (dentro de hackNY, una propuesta de la Universidad de Nueva York que anima a sus estudiantes a usar la tecnología de maneras creativas), no espera mucho de Fish Plays Pokémon, que ya se ha popularizado muchísimo y ha aparecido en todos lados, desde TechCrunch hasta Forbes. 

Lo suficiente como para que surjan parodias: Grayson no es lo único que está jugando a Pokémon ahora mismo, sino que también hay una patata intentando avanzar en Pokémon Azul.

Esta retransmisión, claramente de broma («hasta el momento el progreso ha sido lento», se puede leer en la descripción; «la Patata sigue atascada en la pantalla de New Game. Es una estrategia interesante, veamos si le sale bien») está teniendo, evidentemente, menos éxito que Fish Plays Pokémon, una propuesta considerablemente más trabajada e ingeniosa. 

El caso recuerda al crowdfunding de la tortilla de patata, que no llegó a absolutamente nada. El pez es una subversión inocente y divertida del experimento que originó todo esto; la patata (curioso que siempre sean las patatas las que la lían) sabe amarga, no da buen rollo: por eso hay 1.900 personas viendo a Grayson y solo 60 con el tubérculo.

(Ni siquiera tengo claro que lo de la patata sea una retransmisión en directo real, porque a menudo parece un gif en el que solo se mueve la flecha de New Game a Options; sin embargo, quizá Grayson y la patata puedan hacer las paces virtuales combatiendo con un cable link.)

Mientras tanto, el Twitch Plays Pokémon original sigue con la calma y la autoridad de anciano zen que da la veteranía: puede que lo suyo ya no sea tan rompedor, pero se ha sabido asentar con una naturalidad pasmosa. Su partida actual a Pokémon Stadium 2 no parece forzada; no me cuesta pensar por qué hay cientos de personas intentando jugar a la vez, meses después de que el experimento arrasara por todo internet.

Supongo que en algún momento llegará la Burbuja de las Burbujas; el giro final en el que simplemente dejemos de buscarle narrativas y precipicios a todo lo que ocurre en la red, y nos dediquemos a disfrutar y celebrar y reírnos de las mil y una chifladuras que surgen por estos barrios, dejando la sesera para las cosas que realmente merecen que la usemos. Y eso que soy consciente de que a veces es muy difícil no buscarle tres pies al 4chan.