Antiguos trabajadores de Lab Zero Games fundan un nuevo estudio

Algunos de los antiguos empleados de Lab Zero Games han anunciado la creación de Future Club, un nuevo estudio independiente que funcionará como una cooperativa. «Queremos empezar de cero con una compañía que sea propiedad de los trabajadores y que le de a todo el mundo la posibilidad de opinar con respecto al futuro de la organización», destaca en el comunicado la nueva CEO y productora principal, Francesca Eskenazi, «no habrá una persona que pueda tomar decisiones unilateralmente que afecten a todos porque ese modelo no nos ha funcionado bien. Queremos abrazar un modelo donde todo el mundo es un propietario por igual y su voz tiene el mismo peso». Esquenazi ha destacado que ya están trabajando en un sistema para poder solucionar los conflictos y problemas internos de manera que sean eficientes en depurar responsabilidades.

El estudio tiene en este momento 15 empleados y ya está trabajando en el que será su primer juego, basado en una IP aún por anunciar. «Future Club es un estudio cooperativo propiedad de sus trabajadores y creado con la firme creencia de que los equipos fuertes son algo más que la suma de sus partes», destacan en la presentación, subrayando que todos los miembros ya han trabajado juntos y tienen unas ideas bastante claras de cara al futuro. Entre los antiguos trabajadores de Lab Zero Games que se han incorporado a Future Club se encuentran el animador Jonathan Kim, la directora creativa Mariel Cartwright y el diseñador Earl Gertwagen. «Queremos crear juegos que inspiren a niños y adultos tanto como nuestros juegos favoritos nos han inspirado a nosotros. Queremos centrarnos en animaciones 2D creadas a mano y ver qué podemos hacer para impulsar el medio», destaca Jonathan Kim.      

Entre los objetivos de Future Club se encuentra conseguir un balance saludable entre trabajo y vida personal: «queremos crear juegos que nos apasionen, pero no a expensas de nuestra salud», destaca Mariel Cartwright durante una entrevista a Kotaku, «yo personalmente he tenido mucho crunch en mi vida y estoy harta. He aprendido que el tiempo que paso fuera del trabajo es el que me inspira».  

Tanto Cartwright como Kim se encuentran entre los empleados que el pasado agosto dimitieron de su trabajo como forma de protesta ante el historial de abusos y comportamientos inapropiados por parte de Mike Zaimont, CEO de Lab Zero Games. Tras estas dimisiones, Zaimont acabó por despedir el pasado 4 de septiembre a toda la plantilla restante, alegando la incapacidad del estudio para cumplir con sus obligaciones contractuales. Uno de los puntos de conflicto entre Zaimont y la plantilla del estudio había sido la incapacidad del primero de cumplir su promesa respecto a convertir Lab Zero Games en una cooperativa.