Últimamente estoy recibiendo con mucha alegría los Humble Bundle semanales, no solo porque me parezcan buenas ofertas (hay muchas de esas, y no creo que sea cosa mía apuntar hacia ellas) sino porque creo que acercan algunos juegos especiales e interesantes a mucha gente que de otra forma quizá no habría podido darles una oportunidad. Por motivos económicos, en algunos casos, y geográficos por otros: hasta el jueves, el Humble Weekly Bundle está dedicado al Fantastic Arcade, el rincón dedicado a los videojuegos del Fantastic Fest de Austin.
Como no todos podemos ir a Texas a ver videojuegos independientes, es una alegría poder acceder a seis juegos desarrollados en exclusiva para el Fantastic Arcade, así como otros seis «que ayudaron a definir la esencia del festival», explican los organizadores.
Los seis primeros, los nuevos, me han parecido imprescindibles. Hellmouth es un juego de cocina/lucha en el que dos chefs infernales compiten por hacerle el mejor plato al demonio. ALEA es «un juego psicodélico que es como un simulador de bosque o paseos campestres combinado con Dance Dance Revolution o Guitar Hero, pero todo lo que necesitas es un teclado y unas gafas de sol». HOKY es un juego de hockey que parte de la ignorancia total de las reglas y dinámicas del hockey, creado por Kitty Calis y Jan Willem Nijman, de Vlambeer; es una especie de secuela no oficial de TENNNES, que hacía lo mismo con el tenis. Risky Bison, de los creadores de Desert Golfing, va sobre asegurar el futuro financiero de una manada de bufalos. CRAP! No One Loves Me coge el bobsleigh y lo convierte en una aventura narrativa vaporwave; lo hacen Arcane Kids, uno de esos estudios independientes que no dejan indiferentes a nadie: basta con pensar en su perturbador Sonic Dreams Collection. Por último, Wheels of Aurelia es una mezcla de juego de carreras y narración sobre la Italia de los años 70, un experimento muy atractivo de Santa Ragione, los de Fotonica y MirrorMoon EP.
Precisamente MirrorMoon EP está incluido en el segundo tramo, el de los juegos que inspiraron a Fantastic Arcade. Algunos no necesitan presentación: FEZ, Hotline Miami y Luftrausers son de lo mejor que ha salido de la indiesfera; No Brakes Valet es también de Captain Games (Desert Golfing o Risky Bison, incluido también en el pack), y FRACT OSC fue una de las sorpresas más agradables del año pasado.
Una oportunidad genial para meter el hocico en uno de esos festivales que se escapan hacia los márgenes en busca de nuevas formas de pensar en videojuegos. Y atentos a la máquina en la que se juega a ALEA en Austin, con un mando hecho de musgo.
Some words about @Palomadawkins's new game Alea, which uses a MOSS CONTROLLER http://t.co/EJ2j0iBczk pic.twitter.com/anqrfeV21i
— Chris Priestman (@CPriestman) septiembre 25, 2015
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Ayer compré FEZ para darle algo de vida a mi PS Vita por 10€ y no me arrepiento. No entiendo cómo pudo salir algo tan bonito de una mente tan retorcida.
Lo compré nada más salir por jugar a CRAP! No One Loves Me. Sigo a Arcane Kids desde que lanzaron Zineth, que es de los mejores juegos que de patinaje para ser arcade, más libertad de movimiento y buen rollo consiguen trasmitirme.
SOLD