Killzone: Shadow Fall ocupa 40GB, pero podrían haber sido hasta 290

Killzone: Shadow Fall ocupa 39,7GB en su versión europea; si lo descargamos, podremos empezar a jugar a partir de los 7,5GB, porque recurre a datos en streaming para poder ejecutarse sin necesidad de tener todos los datos descargados. Aunque es mucho, antes era más: en Guerrilla han reconocido que llegaron a tener versiones de hasta 290GB, totalmente imposibles de manejar y por las que tuvieron que repensar la forma en que accedían a los datos del juego. «Creo que en cierto punto la imagen del disco que estábamos generando era de alrededor de 180GB», explica Michael van der Leeuw, director técnico de Guerrilla. «Y si hubiéramos puesto en él todos los niveles, cosa que no hicimos, porque entonces el generador de imágenes se hubiera roto, estaríamos hablando de unos 290GB de datos». «Así que tuvimos que rediseñar por completo la manera en que tratábamos los datos. Y trabajamos mucho —esto es algo de lo que estoy extremadamente orgulloso, de hecho— para optimizar el patrón de acceso al disco. Sony hizo librerías especiales para nosotros, porque fuimos los primeros en llegar a esta clase de problemas. Creo que es algo que mucha gente necesitará hacer en el futuro». Curiosamente, el disco de Killzone 3 traía más datos que Shadow Fall: 41,5GB. Van der Leeuw explica que «la mayoría son texturas», y que si el tamaño es considerablemente mayor que el de otros juegos que salen en varias plataformas y generaciones es «porque no tenemos materiales que tengan que ser pensados para unas especificaciones inferiores»: todo lo que hay aquí está pensado exclusivamente para PlayStation 4. Además de las texturas, el tamaño del mapa también ayuda a acumular gigas: «la superficie del mapa, me aventuro, debe de ser entre cinco y diez veces más grande que la de Killzone 3», dice van der Leeuw. Viendo el lanzamiento digital de juegos como GTA V o los problemas que experimentan muchos usuarios de todo el mundo con la distribución no física, crucemos los dedos por que las conexiones a internet avancen rápido y no acabemos teniendo descargando juegos por encima de nuestras posibilidades, como decía aquel. Killzone: Shadow Fall sale el 29 de noviembre, junto con PlayStation 4. Está claro que es el juego más indicado para comprobar lo que da de sí la consola el primer día.