Los jugadores de battle royale son los que están más dispuestos a realizar compras in-game

El crecimiento masivo de los títulos battle royale obedece, como no, a una tendencia de mercado. Abundan los juegos porque los usuarios parecen estar interesados en probarlos, hay muchos títulos porque, en general, resultan rentables. La explosión de los battle royale, lideradas por PUBG y Fortnite, es una de las tendencias que está marcando la industria este año. Según los datos recogidos en el último estudio de newzoo, todo indica que no será el último. Mediante un test realizado en 28 países y dirigido a obtener datos estadísticas de jugadores, newzoo ha determinado que los aficionados a los battle royale dedican más tiempo a jugar, ver partidas y realizar streamings que los usuarios de otros géneros competitivos. Además, los jugadores de battle royale están más dispuestos a realizar compras in-game que el resto, en razón de un 88 frente a un 75%.

Pese a todo, aunque no hagamos más que escuchar lo extendidos que están los battle royale, solo el 19% de la gente que juega a videojuegos se decantan por este género frente al 50% que prefiere otro tipo de títulos competitivos como Call of Duty, Overwatch o League of Legends. Una de las razones para que parezcan más populares de lo que son puede ser —además de la novedad, por supuesto—, el hecho de que los aficionados al battle royale están más dispuestos a definirse como gamers y a admitir que jugar es una parte muy importante de su vida. La visibilidad de los battle royale es otro factor al comprender que más de un 80% de los fans del género disfruta viendo partidas grabadas o en directo y el 35% de ellos no duda en donar dinero a sus jugadores favoritos.

Dentro del género, newzoo ha descubierto que los jugadores de PUBG son, en general, jugadores veteranos mientras que los que disfrutan con Fornite suelen ser más casuales y bastante jóvenes con un solapamiento del 40% (es decir, casi la mitad de los jugadores de battle royale juegan indistintamente a las dos franquicias). La estética de Fortnite, así como su accesibilidad y el hecho de que sea free-to-play parecen ser los culpables de que este sea el título más jugado dentro del género.

Mientras que el engagement de los usuarios de battle royale sea tan alto, está claro que no veremos el género decaer. La verdadera pregunta es por qué. Qué tiene este tipo de competición que anima tanto a volver y a invertir dinero real, especialmente a jóvenes que aún no cuentan con ingresos propios. La popularidad de Fortnite ya está siendo señalada con alarma por los medios más amarillistas y las noticias de niños que se dejan pequeñas fortunas de mamá y papá se comparten con alegría acompañadas de la palabra adicción. Evidentemente, no hay razón para preocuparse pero sí para que la industria se mantenga ojo avizor. PUBG puede esconder el secreto de cómo hacer que los jugadores terminen sacando la cartera. Una nueva vía de financiación ahora que Kickstarter parece estar en decadencia.