SteamSpy vuelve con algún pero

El responsable de SteamSpy, el servicio no oficial que ofrece estadísticas de ventas y uso de los juegos de Steam, ha explicado en un artículo reciente sus planes para su regreso. Los últimos cambios en la API de Steam Web hicieron que el algoritmo de SteamSpy dejara de funcionar; desde ese momento, Sergey Galyonkin ha trabajado para crear uno nuevo que funcione dentro de los nuevos parámetros impuestos por Valve.

Aplicando una serie de ideas sacadas de un doctorado que nunca se llegó a sacar, explica Galyonkin que ha podido estimar con bastante precisión las ventas de algunos juegos, entre ellos el reciente Frostpunk. 11 bit studios, el equipo responsable del juego, anunció hace poco que el juego había vendido 250.000 copias en sus primeros días en el mercado; el algoritmo de SteamSpy estimó unas ventas de 252.000 unidades, suficientemente cerca como para considerarlo preciso.

«Sigo reescribiendo la web para moverla al nuevo modelo matemático», explica Galyonkin. «Muchas cosas siguen no disponibles, pero la mayoría acabarán volviendo. Por ejemplo, he retirado temporalmente los datos por país. No estaba contento con ellos antes, y ahora es un buen momento para hacerlos de nuevo para que sean más útiles. Por otro lado, lo básico (el número de poseedores, la distribución del tiempo de juego, los títulos relacionados) ya funciona bien. La API también ha vuelto, aunque de forma un poco limitada».

El regreso de SteamSpy es inminente, entonces, aunque de momento la precisión del servicio no convence a su responsable. De los 70 juegos con los que ha hecho pruebas (los casos en los que puede comparar las estimaciones de su algoritmo con datos reales de ventas), en un 90% ha conseguido un margen de error del 10%; en el resto, sin embargo, ha habido casos en los que la diferencia entre la estimación y la cifra real es hasta de un 500%.

¿Pero a santo de qué ese cambio de API que hizo que SteamSpy dejara de funciona en primera instancia? Galyonkin dice que en principio pensó que tenía que ver con la General Data Protection Regulation (GDPR), la nueva regulación de la Unión Europea sobre el tratamiento de datos de usuarios, aunque «no parece ser el caso», escribe el desarrollador. «Valve sigue mostrando tu nombre real, logros, grupos, capturas de pantalla y amigos por defecto, y todavía no ha cambiado su EULA [End User License Agreement, la licencia en la que se exponen los términos y condiciones de uso del software, en este caso Steam; NdR] para cumplir con la GDPR. No quiero decir que no lo vayan a hacer, pero el cambio en la API desde luego no se debió a eso».

Al mismo tiempo, Steam cambió el API de la tienda, que incluía información sobre precio, géneros o fechas de publicación, para hacerlo inservible, otro cambio inesperado que le puso las cosas más difíciles a Galyonkin. Valve no se ha puesto en contacto con él en ningún momento, a pesar de que envió a la compañía una propuesta para compaginar los cambios en Steam con las necesidades de SteamSpy; la han leído, pero no le han dicho nada.

Así, seguir con SteamSpy parece una cuestión de orgullo y, en parte, de no dejarse pisotear por Valve. A pesar de que no tenía tiempo para el proyecto por las circunstancias de su trabajo (Galyonkin tiene un Patreon para financiar SteamSpy, pero su día a día es en Epic Games, donde trabaja como director de estrategia de publicación), desde el cambio de API ha recibido una serie de emails que le han animado a seguir con el proyecto: desde un publisher que pudo empezar a funcionar gracias a la información que consiguió en SteamSpy hasta numerosos desarrolladores individuales a los que el servicio les había hecho la vida más fácil.

«Tardaré un tiempo», termina Galyonkin, en recuperar la normalidad, «y todavía es posible que Valve haga otro movimiento para cerrar el servicio, pero hasta que eso ocurra SteamSpy seguirá funcionando».