The Iconoclasts es la hostia y necesita nuestra ayuda

Voy a contaros la historia de Joakim Sandberg, konjak para los amigos. No la conocía hasta hace un ratillo, aunque días atrás había visto algo por encima, pero vale la pena. Resulta que el chaval ——es del 86—— lleva ya un tiempo dibujando bastante bien, animando sprites para terceros y, más importante, haciendo sus propios juegos con el eterno amor por el pixel como denominador común. Según dicen, Noitu Love 2 es el mejor y más apañado de los que ha terminado hasta el momento; podéis bajar una demo para comprobarlo y apoquinar diez euretes si de verdad es tan bueno. Ahora, en cualquier caso, toca hablar de The Iconoclasts. Este precioso plataformas de acción es el segundo intento de su proyecto más largo y ambicioso. El problema es que el tío parece estar tremendamente rallado y apurado a nivel de pasta. «La vida es dura, amiguete», «yo a tu edad ya trabajaba» o alguna de estas se le podría soltar al bueno de Joakim… si su proyecto no fuese tan cojonudísimo. De aquí se puede descargar lo que lleva y a mí me ha encantado la primera media horita que llevo; gráficos fantásticos, control bien ajustado y mucho potencial en lo de alternar la pistola y la llave inglesa veo yo de momento. Compararlo con Cave Story, como hacen en Destructoid, son palabras mayores, pero sí empieza muy, muy bien. Aunque no garantiza nada, konjak ha habilitado un botón para donaciones para poder permitirse acabar The Iconoclasts con la ayuda de todos. Ojalá pueda.