Resultados de

#linux

El reboot de Gauntlet sale el 3 de septiembre
12

Menos mariconadas y más juegos como este

El reboot de Gauntlet sale el 3 de septiembre

El nuevo juego de los creadores de Magicka ya tiene fecha de lanzamiento; como declaración de intenciones, se puede ir reservando un pack de cuatro copias en Steam.

Heavy Bullets, un FPS psicotrópico
7

¡Y ecológico!

Heavy Bullets, un FPS psicotrópico

Si es de Devolver Digital, es bueno. Esto supongo que ya lo tenemos todos bien clarito. A partir de aquí el juego que distribuyan puede ser guay o genial, y creo que Heavy Bullets se agruparía en la primera categoría, la menos brillante pero igualmente seductora. Creo que la idea se entiende con cinco segundos de gameplay: un FPS pasillero, laberíntico y de generación procedural (o procedimental, que suena horroroso pero según Pep es más correcto) de aires minecraftianos pero con una paleta de colores enloquecida y plagada de neones, y con un ritmazo magnífico.

Teslagrad nos presenta su edición física
2

En caja, como se ha hecho toda la vida

Teslagrad nos presenta su edición física

El juego con caja de cartón, manual de instrucciones y muchas cosas más, en una «versión física retro-limitada» que da gusto verla.

Superhot busca pasta en Kickstarter
12

Dádsela o que os parta un rayo

Superhot busca pasta en Kickstarter

El genial FPS que experimenta con el tiempo necesita dinero para florecer como juego completo, después de arrasar en la jam 7dfps.

Anunciado Killing Floor 2
3

Matador, matador

Anunciado Killing Floor 2

Con un teaser que va de la inspiración residenteviliana al ridículo más desenfadado con un locutor tranformándose en algún tipo de bestia feroz, Tripwire Interactive acaba de anunciar Killing Floor 2, la secuela de un espléndido FPS que ofrece uno de los modos horda (que en este caso es la forma principal del juego) más exigentes que he jugado jamás. Tal cual.

Análisis de Sir, You Are Being Hunted
5

Blanco humano

Análisis de Sir, You Are Being Hunted

Robots victorianos con bigotes encerados y sombreros de copa llegaron al archipiélago en son de paz; solo querían charlar un ratito. Era mentira, claro.