Aunque parezca que los nintenderos lleven años viviendo en zonas residenciales ajardinadas con casas de gominola y estanques de chocolate líquido con pececitos de galleta, lo cierto es que en uno de los ilocalizables lugares donde centenares de duendecillos felices forjan sus impresoras de billetes también conocidas como Wii, las cosas no van tan bien como deberían.
Ni actualizo gráficas con las cifras de cada mes ni llevo la cuenta de las unidades vendidas en todo el mundo, pero los porcentajes que protagonizan un estudio de Strategy Analytics me parecen bastante interesantes.
Treyarch ha estado estos días de gira, mostrando su próximo título a gente con más suerte que nosotros.
Lo deja bastante claro la imagen que aparece al salir de la demo de Rock Band: Green Day, con distintos iconos representando una guitarra, un bajo, una batería, tres micrófonos por lo de los armónicos vistos ya en el juego de The Beatles y un piano.
¿Qué os ha parecido el final más esperado del año? ¿Un momento de clímax en la historia de la televisión? ¿Una puta mierda? ¿Una extraordinaria pirueta narrativa que consigue aunar ambas posibilidades? Partamos de la base de que ningún desenlace podrá superar jamás al de Los Serrano, de la cual sólo vi el final y me dejó francamente conturbado, y sigamos con nuestras vidas.
SEGA ha confirmado el retraso de Sonic The Hedgehog 4 Episode I, que llegará a finales de año y no en julio, como estaba previsto.
Qué grandes noches pasamos escuchando al malogrado Julián Lago haciendo preguntas comprometedoras a otro muerto ilustre (¿o no?) como Jesús Gil siendo sometido a la prueba del polígrafo en La máquina de la verdad.
Después de millones de peticiones online, cientos de manifestaciones de fanáticos ansiosos y un par de cartas de asociaciones de remeros que lo pedían con ansia, por fin ha llegado a Wii la Rowing Machine, el plug-in definitivo para la consola de Nintendo.
En su imparable espiral hacia el casualismo más feroz, Nintendo ha dejado ya de tener reparos a la hora de, incluso, retocar las franquicias tradicionales de los járcors para hacerlas más accesibles al público que no juega asiduamente.