Exapunks, el nuevo juego de Zachtronics, ya está disponible en acceso anticipado

El nuevo juego de Zach Barth, la mastermind detrás de Zachtronics (Opus Magnum, Spacechem), se llama Exapunks, es un juego de puzzles retrocyberpunk en el que te pones en la piel de un tipo que tiene que hackearlo todo para sobrevivir. El año: 1997. El tráiler: sobre estas líneas.

Como viene siendo habitual en los juegos de Barth, Exapunks es un juego de puzzles abierto en el que debemos programar EXAs, virus pensados para hacer trizas todo lo que se ponga en su camino (incluidos otros virus) y «marcharse sin dejar rastro» en los sistemas que hackeas, que van desde bancos o emisoras de televisión hasta videoconsolas, el gobierno o «tu propio cuerpo», se lee en la web del juego en Steam.

Aunque está en acceso anticipado, Exapunks incluye más o menos todo lo que se podría pedir (una historia completa, un editor de puzzles, compatibilidad con Steam Workshop e incluso un modo sandbox en el que es posible programar otros juegos) y la idea es, en los próximos meses, añadir nuevo contenido en base al feedback de los jugadores y trabajar en la estabilidad de la versión final.

Aún no he podido jugarlo, pero por lo que leo en las reseñas de Steam parece un punto más accesible que otros juegos de Zachtronics (fascinantes y rotundos, pero también un poco abrumadores para los que llamamos «puzzle» a abrir una puerta cerrada moviendo una caja hasta un interruptor) y parece que la historia, que esta vez tiene más peso, ayuda a hacer más accesible un sistema de puzzles que, con todo, mantiene la profundidad y complejidad por los que se conoce a Zach Barth. Esperamos poder hablaros más en profundidad sobre Exapunks pronto.

Por último, además del juego en Steam también se ha puesto a la venta una «edición limitada» que incluye los dos zines con tutoriales, consejos y pedacitos de la historia (a los que se puede acceder también desde el juego; esta es su versión física, en papel), unas gafas 3D y un «sobre secreto» con algo que no se puede decir. Con el envío a Europa, cuesta 25 pavetes.