La versión Redux de la campaña de The Long Dark pide una segunda oportunidad

Ayer la gente de Hinterland nos enviaba una nota de prensa que daba un poco que pensar: al margen de la información que nos querían transmitir, nos preguntaban a los medios cómo de posible sería dar una segunda oportunidad a un juego para captar una nueva primera impresión. Es algo interesante porque hasta hace poco la crítica se construía sobre productos finalizados, cerrados y publicados, pero con los videojuegos esas reglas no son tan claras y el producto puede cambiar cuando la crítica ya está escrita. Le hace a uno preguntarse si esas impresiones deben servir a la obra de la que emanan y adaptarse a sus cambios posteriores, reescribirse y actualizarse, o ya han quedado escritas en piedra y son inamovibles. O incluso si lo más apropiado es añadir una segunda crítica, también Redux, que sirva como texto autónomo aunque haga referencia al original.

¡Pero bueno, vayamos a la cosa en sí misma! Resulta que los creadores de ese juego de supervivencia en la nieve titulado The Long Dark no estaban del todo felices con cómo habían quedado los dos primeros episodios de Wintermute, el modo historia del juego, así que han dedicado el último año a rehacerlos totalmente y hoy los han vuelto a publicar como Wintermute Redux.

Por lo visto el remozado es importante: lo han vuelto a escribir desde cero, han vuelto a implementar nuevo trabajo de voz, nuevas animaciones, han cambiado totalmente el estilo narrativo, los puntos argumentales importantes, los diálogos y ahora presentan una nueva estructura de misiones que dicen que es más flexible y accesible. Y todo esto con una capa de pulido que ellos mismos echaban de menos en la primera ocasión en que los publicaron.

Lo cierto es que lo más problemático de The Long Dark era la brutal exigencia en el ritmo al que debíamos llevar a cabo acciones para sobrevivir, la rapidez con la que el frío, la sed, el hambre o la enfermedad se le echaban a uno encima sin posibilidad de escapar ni por unos minutos de esa linealidad invisible y forzada dentro de lo que en teoría es un sandbox. En el modo historia esa linealidad era todavía más férrea: había que hacer una serie de cosas exactas después del accidente aéreo en las montañas del norte de Canadá en muy poco tiempo y no había mucho que discutir, o lo hacías rápido o morías, así que se agradecerá una experiencia con algo más de margen.

Hinterland nos recuerda que The Long Dark es esencialmente dos juegos: el sandbox original. que está muy bien como tal y que no se ha tocado más allá de actualizaciones y arreglos típicos; y el modo historia Wintermute, que aparece como DLC gratuito y que ahora ha sufrido esta especie de reset con los primeros dos episodios reformados desde los cimientos y otros tres episodios que están en desarrollo y saldrán, también de manera gratuita, durante el próximo año.