Se puede decir lo que se quiera sobre la estructura de mundo abierto, pero es imposible negar su popularidad y la cantidad enorme de posibilidades que ofrece. No todos los sandbox son GTA: sandbox era Burnout Paradise y sandbox será LEGO Batman 2, dos juegos bastante alejados de nuestro simulador de macarra profesional favorito. Sandbox es, también, este Sleeping Dogs que poco a poco, con paso firme y sin hacer otro ruido que el de los guantazos fuertes en la napia, se ha ido ganando nuestro favor: no las tenía todas consigo, y yo era el primero que tenía más dudas de la cuenta. Jugarlo ha sido revelador: una hostia a tiempo quita mucha tontería, dicen, y en este caso no va muy desencaminado. La versión que probé es la que se podrá jugar en el E3, y tenía todo lo que se le puede pedir a una build no definitiva: se podían ver muchos puntos fuertes y dejaba el terreno listo para poder esperar todavía algunos más. Lo primero que hice como Wei Shen, el policía infiltrado que protagoniza el juego, fue significativo: salí del piso donde empezaba la demo y le casqué una patada en la cara a mi pobre vecina. Pobre chica, no había hecho nada. El impacto fue duro y la sensación que me dio el control fue muy positiva, algo que pude corroborar al poco tiempo, cuando fui a una academia de artes marciales a aprender algún movimiento nuevo y montar bulla en un callejón cercano. Sé que hay armas de fuego en Sleeping Dogs, pero en todo el rato que jugué no vi ninguna; esto me gustó bastante, especialmente cuando comprendí del todo los controles. Me gusta pensar que Sleeping Dogs es una mezcla de GTA y Streets of Rage: del mismo modo que GTA tiene elementos de shooter en tercera persona simplificados para encajar en su propuesta, aquí se nota mucha intención de hacer un beat ‘em up en 3D encajado dentro de una estructura de mundo abierto. Y funciona bien, la verdad: no es God Hand, pero los timings a la hora de hacer los ataques, los distintos combos que tenemos a nuestra disposición y el sistema de contraataques, simple pero efectivo, son bastante coherentes con el universo de Tríadas y macarras callejeros del juego. Ya en esta pequeña incursión en el callejón de detrás de la academia me vino a la cabeza el beat ‘em up como género de referencia, pero la sensación se hizo más fuerte varias misiones después. La cosa era así: tenía que ir a hablar con un mafioso en una discoteca, y la cosa olía a una legua a festival de hostias. Hasta cierto punto la cosa resulta familiar: coges el coche, vas a la discoteca, hablas con el portero; te ligas a la responsable de la zona VIP, cantas en un karaoke con ella (atención al minijuego, una especie de Singstar en el que Wei Shen no tiene ningún reparo a la hora de darlo todo con I Fought the Law de los Clash) y por fin puedes llegar al mafiosillo. La cosa se complica entonces: su cohorte de punkis no es del todo amistosa, y ahí empiezan los mamporros. Esta parte fue la que definitivamente me hizo pensar en todos esos beat ‘em ups clásicos que tantas horas de diversión nos han dado: neones, música de discoteca, punkis con peinados raros, golpes a troche y moche. Todo lo demás, lo deseable en un juego de este tipo: misiones en las que tenemos que ir con el coche por la atractiva Hong Kong del juego, escenas de vídeo en las que se nos cuenta la tormentosa historia de Wei, toques de humor ocasionales (muy graciosa una misión en la que la cosa se tuerce y acabas secuestrando un autobús con unos pobres tipos dentro y tienes que huir de la policía) y algunos detalles de buen hacer, como los ciclos de día y noche o los efectos climatológicos, que hacen que el juego entre también por los ojos. Sleeping Dogs puede ser uno de los grandes de este año. A mediados de agosto podremos comprobar qué tal se las apaña en formato completo, pero el aperitivo que pude probar me dejó con ganas de más; hablaba al principio sobre las posibilidades de la estructura sandbox, y creo que aquí se ve que todavía hay caminos por explorar. Sin ser especialmente revolucionario, sí parece que Sleeping Dogs apuesta por ser más fuerte que sus rivales en otras cosas y ahí puede estar su principal baza. Puede que este verano nos llevamos una sorpresa de las buenas, así que muy atentos a estos chinos con mala leche.
Redactor
- #Noticias
El JRPG, mejor en gallego
Podcast Reload: S16E10 – Dragon Quest III HD-2D Remake, Tequila Works, Adrián Suárez, Quick Play!
- #Noticias
Recarga Activa #926
Valve celebra los 20 años de Half-Life 2 con un documental sobre cómo se hizo el juego
- #Noticias
Recarga Activa #927
Astro Bot, Final Fantasy VII Rebirth o Balatro, entre los juegos más nominados en The Game Awards 2024
Solo los usuarios registrados pueden comentar - Inicia sesión con tu perfil.
Enserio le tengo unas ganas locas…. me gusta lo que leo ¡
Tiene pinta de ser de estos juegos con un 8 de media en Metacritic. De los que esperas diversión sin grandes pretensiones y una vez te pones a los mandos disfrutas mucho más que otros con notas de sobresaliente.
El no tener (al menos en apariencia) una historia al estilo Rockstar puede ser su cruz en los análisis. Pero que se lo digan a Burnout Paradise o NFS: Hot Pursuit.
No han dicho nada del online verdad? A este juego un cooperativo SÍ que le vendría genial.
Pintaza, el sistema de lucha parece un poco el de Batman, creo que iré vestido de medico loco todo el juego.
Jo, parece que han hecho un revuelto de todos los juegos de acción de esta generación. Pero con bastante gracia y momento muy locos.
Otro juego que apuntar este año. ¡Menuda ruina!
A mi personalmente sigue sin convencerme, me huele a bluf,
pero el avance ha hecho que tenga curiosidad por probarlo. Me llama especialmente la atención que el juego tire más de ostias que de disparos.
A ver que acaba saliendo, aunque me ha dado la sensación de que los vídeos que se han mostrado hasta ahora de gameplay están vitaminados.
Me ha gustado mucho todo lo que he leído. No era de los que más me llamaban la atención, pero eso ha cambiado en cuanto he visto algunos conceptos como «cantar canciones de The Clash» y «golpes a troche y moche en discotecas».
Habrá que seguirlo muy de cerca.
Esto tambien ha llamado poderosamente mi atención.
El rollo «Yo contra el barrio» de toda la vida a base de hostia fina en un mundo abierto me la pone morcillona.
@adelucas
De hecho, una de las cosas que más me gusto del último vídeo fue lo de estamparle a un tipo la jeta contra una cabina telefónica para acto seguido golpearle directamente con el teléfono de forma totalmente innecesaria. Si hay variedad de objetos con los que interactuar y esto no se queda solo en lo anecdótico -a aun peor, tiene solo 3 objetos que te ves obligado a usar todo el rato- puede estar extremadamente bien.
Viene a ser un Yakuza americano, seguramente con menos alma, pero un buen juego.
Parece una mezcla de muchos juegos, pero pinta atractivo. Desde luego bastante mejor que True Crimes, que aunque divertido, resultó un poco bluf.
Saludos
Me cuesta creer que nadie haya jugado a los True Crime y vean todo esto como nuevo, y más aún que ni se mencione que este juego es True Crime 3 con otro nombre.
Me hace gracia también lo de sleeper, cuando desde su anuncio como TC: Hong Kong ya se sabía que iba a ser bueno como poco.
una pregunta,¿ tiene algo de shenmue? me refiero a la interacción con el mundo, lo digo por que en el ultimo video se ven peleas de gallo, domino, carreras, o ¿es mas parecido a just cause? con posibilidades muy locas utilizando el escenario…y, ¿ que tal el tiempo bala y el manejo de los vehiculos? gracias de antemano.
también es la impresión que yo tengo
por lo general los juegos en los que te toca asumir el rol de poli o soldado me dan bastante repelús, pero si me sirve como substituto del arkham city para dejar ir la mala leche, igual me lo planteo.
Que demonios, es un True Crime. Kung Fu, tiros y coches.
El juego se llamaba True Crime: Hong Kong al principio. No es que se parezca, es que es un True Crime.